Los pasos de peatones de las calles Portillejo y Madre de Dios serán retrasados para evitar su proximidad con rotondas. Estas obras, a las que se suma la creación de un paso elevado en la calle Segundo Arce, se enmarcan en el Plan de Mejora de la Movilidad Urbana, y tienen un plazo de ejecución de tres meses.
El concejal de Transporte urbano, Tráfico y Vías Urbanas, Francisco Iglesias, ha visitado este martes el inicio de las obras de mejora de la Movilidad Urbana en la calle Portillejo a la altura de la Circunvalación.
Dentro de los proyectos de conservación y mantenimiento de la ciudad de Logroño se engloban pequeñas actuaciones destinadas a mejorar zonas y rincones, “pero de forma especial para mejorar la seguridad vial y la seguridad del peatón”.
Una vez analizadas por parte de la Concejalía de Movilidad las peticiones ciudadanas, el Ayuntamiento llevará a cabo el retranqueo de dos pasos peatonales, situados en las calles Portillejo con Circunvalación y Madre de Dios con Luis de Ulloa, así como un paso sobreelevado en la confluencia de las calles Segundo Arce con Concepción Arenal.
Concretamente se ha comprobado que existen pasos de peatones que no cumplen la separación necesaria a las rotondas, “lo que provoca que los vehículos no tengan espacio suficiente delante de los pasos, obstaculizando el tráfico de la rotonda y, en ocasiones, invadiendo el paso de peatones, generando situaciones de peligro por atropello a peatones”, ha explicado el concejal de Movilidad.
Uno de ellos es el paso elevado de la calle Portillejo, donde por seguridad vial se suprimió el tránsito peatonal por la calle oeste. Al cambiar el uso de la zona a residencial y comercial, ha aumentado el flujo peatonal.
Otro caso similar es el paso peatonal de Madre de Dios junto al colegio Caballero de la Rosa, donde existen cuatro carriles de circulación con mediana central.
Al existir dos salidas de vehículos sobre la acera, el paso de peatones se ubicó entre la rotonda y los vados sin dejar espacio necesario de frenada a los vehículos, “por lo que es necesario alejarlo de la rotonda, así como también de los vados de los vehículos”, ha señalado Iglesias.
Del mismo modo, se ha detectado en el Sector del Campillo que hay vehículos que utilizan la calle Segundo Arce como atajo a la avenida de la Sonsierra, aumentando el tráfico de paso y elevando la velocidad de los vehículos en una calle eminentemente residencial. Ya que actualmente existen pasos de peatones convencionales, Iglesias ha considerado conveniente sobreelevar el situado en la intersección con Concepción Arenal, y así reducir la velocidad de los vehículos y dar mayor seguridad a los peatones.
El plazo de ejecución previsto para las tres obras es de tres meses y cuentan con un presupuesto de 52.067 euros.