La Asociación Riojana Para el Autismo (ARPA Autismo Rioja) prevé poner en marcha talleres pre-laborales para jóvenes que sufran esta dolencia, como ha avanzado la presidenta de la entidad, María Valle Vaquero, durante la visita que ha realizado la alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, al nuevo local de tratamientos y promoción de autonomía de la entidad.
Gamarra ha recordado que “en marzo del pasado año nos reunimos con la junta directiva de la entidad, para informarles de la cesión por 15 años de un local en la calle Paseo del Prior de 171,58 metros cuadrados”. Este local se suma al cedido en la calle Pío XII, que albergaba la antigua sede de la entidad y actualmente es el segundo centro de programas y tratamientos.
Para la entidad es fundamental este local ya que, aunque ya contaba con varios recursos especializados, en los últimos tiempos se detectó la necesidad de crear nuevos medios para responder a las actuales necesidades, un hecho al que se suma el incremento de personas con autismo.
“En este local se van a llevar a cabo dos actividades fundamentales para ARPA: albergar el centro de tratamientos psicosociales y un centro ocupacional y de preparación a la vida adulta”, ha señalado la alcaldesa. “Supone un refuerzo del trabajo fundamental y necesario que realiza esta entidad por las personas con autismo y sus familias. La entidad llega donde las administraciones no alcanzan, por lo que es muy importante apoyar cada paso que ellas den”, ha añadido.
En este sentido, el año pasado el Ayuntamiento proporcionó a la Asociación 12.000 euros de subvención para el programa de integración social destinado a niños y jóvenes con trastorno del espectro autista.
Vaquero ha destacado que, con esta acción, a la que acuden cinco usuarios, “se están retomando los estudios de los jóvenes de funcionamiento normal y alto que tuvieron dificultades en el sistema educativo tradicional y no pudieron finalizar la formación reglada o fueron derivados a formación de garantía social”.
“El fin es que, aquellos que así lo deseen puedan superar las pruebas de acceso a universidad o ciclos de estudios y retomen la formación reglada para que, con el apoyo necesario, logren sus metas profesionales que deben estar sustentadas en sus motivaciones y talentos, porque todos tenemos una genialidad, algo, y a estos chavales queremos sacárselo”, ha detallado.
En este momento, se está atendiendo en el nuevo centro a 45 usuarios con autismo, 30 familias, 20 hermanos “con los que también se hacen talleres” y otros cinco usuarios “con terapias individuales”. El objetivo es llegar a contar con los talleres pre-laborales “para preparar a algunos de esos chavales para un trabajo”, en otro proyecto “que también nos gustaría para el futuro, un centro especial de empleo”.