La recomendación de las autoridades es clara: sólo hay que salir de casa para lo estrictamente necesario. La mayoría de los ciudadanos han obedecido a esta norma y este sábado llamaba la atención ver calles de Logroño prácticamente vacías cuando normalmente están llenas de gente.
Sin embargo, no toda la ciudadanía ha respondido igual y también los hay confiados, irresponsables o poco informados que piensan que pueden salir y seguir haciendo vida normal. De hecho, este sábado había varios bares abiertos, pese a que este viernes se transmitió la recomendación de cerrar a toda la hostelería riojana.
Tampoco en los supermercados se siguen estrictamente las recomendaciones y hoy se podían ver largas colas sin respetar las distancias de seguridad.