Cerca del 20% de los 460 afiliados que mañana elegirán secretario general de la Agrupación Socialista de Logroño habrían llegado en los últimos meses, según apuntan fuentes de Izquierda Socialista de La Rioja. Desatada fiebre por un partido en horas bajas o manipulación del censo electoral, he ahí la cuestión. No son pocas las voces que apuntan a un proceso irregular como la opción más probable, entre las que destaca la de su exsecretaria general Inmaculada Ortega: “La victoria tiene que basarse en los méritos propios. Ningún candidato puede aceptar la alteración de un censo en su beneficio”.
El portavoz de la comisión gestora que maneja la agrupación desde hace siete meses, Francisco Javier Rodríguez Peña, señaló que “es falso que el censo se haya inflado”. Según sus datos, 55 personas se han unido a las filas socialistas en Logroño desde julio y quince se han dado de baja. “Durante el periodo en el que Inmaculada Ortega fue secretaria general se dieron de baja ochenta y de alta veinticuatro”, añadió.
Estas personas que se habrían afiliado al PSOE para asegurar una victoria electoral serían familiares, cónyuges o similares de gente cercana a la ejecutiva regional, que, en teoría, votarían por el candidato Kilian Cruz, quien cuenta con el respaldo de la dirección del partido. Miembros de Juventudes Socialistas también participarían en estas elecciones, a pesar de tener todavía edad para militar en la organización juvenil, indican desde Izquierda Socialista.
No terminan ahí las críticas al desarrollo de estas elecciones. El núcleo afín al segundo aspirante, Javier Bañares, ha denunciado que se les ha dado de baja sin respetar los cauces reglamentarios y que, al ponerlo en conocimiento del partido, les han respondido que hasta dentro de dos meses no pueden volver a afiliarse porque el censo ya está cerrado. Algunos de ellos han visto cómo habían causado una “baja voluntaria” sin haberla solicitado, y otros se han encontrado fuera al devolver una cuota “por error”, cuando esto ocurre al segundo incumplimiento y tras la comunicación del organismo. En este sentido, Rodríguez Peña comentó que “para entrar en el censo había que estar al corriente de pagos en el momento en el que se convocó la Asamblea, el 7 de enero”.
Hay más. Además de las altas y las bajas, es posible que se hayan dado traslados de asociados desde otras agrupaciones. Esto significa que, por ejemplo, una persona inscrita en la Agrupación Socialista de Haro se cambie a la de Logroño porque haya trasladado su vivienda habitual de la primera, a la segunda localidad. Ningún socialista de los que habría realizado esta acción en los últimos meses, todos supuestamente afines a la ejecutiva regional y a su secretario general, César Luena, habría cambiado su lugar de residencia, según apuntan desde Izquierda Socialista. “En veintidós meses han habido tres traslados de agrupaciones municipales de La Rioja a Logroño y dos afiliados de Logroño que se han ido a otros lados. Si esto le parece raro a alguien…”, dijo el portavoz de la comisión gestora desmintiendo esas acusaciones.
Kilian Cruz o Javier Bañares. Javier Bañares o Kilian Cruz. Sea cual sea el resultado que mañana se produzca en las elecciones a la Secretaría General de los socialistas logroñeses, no va a estar exento de polémica.