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Los comportamientos machistas que las mujeres soportamos a diario

Rioja2

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No volver sola a casa por la noche, tener que aguantar miradas o comentarios incómodos por la calle, perder trabajos al quedarte embarazada o solo por el hecho de estar en edad de ello... Las mujeres hemos interiorizado determinados comportamientos que, por desgracia, están normalizados en nuestra sociedad y que son totalmente censurables. Y nos pasan a todas, sólo por el hecho de ser mujeres.

Rioja2 ha realizado una encuesta entre mujeres para conocer su realidad en La Rioja y nos hemos encontrado desde experiencias de acoso, intimidación e incluso violación hasta situaciones de micromachismo que a veces cuesta reconocer.

Estos son algunos de los testimonios recogidos:

- “Un día me pedí una caña en un bar de la Laurel y a mi acompañante una Coca-cola, le da a él la cerveza y a mí la Coca-Cola, cuando le digo que la cerveza es para mí me miró el camarero y se me echó a reír diciendo, oh es para ti”.

-“Por la calle más de una vez me ha pasado y es que me llama la atención que mi primera experiencia de decirme algún comentario sobre mi físico comenzara con apenas 12 años. Es que miro fotos de cuando tení 12 y literalmente aún usaba ropa de niña que me compraba mi madre. Señores que podrían ser mis padres o mis abuelos que me han chiflado cuando volvía a mi casa o siguiéndonos a amigas mías y teniéndonos que esconder en algun portal que pillábamos abierto o entrando en los bancos fingiendo sacar dinero…”

- “Una vez que no salí de fiesta y me quedé en casa, sobre las 2/3 de la mañana me llamaron unas amigas para pedirme que por favor las esperara en mi portal con la puerta abierta porque dos chavales de unos 30 años las estaban siguiendo desde hacía un rato y estaban cerca de mi casa. Obviamente corriendo bajé al portal descalza mientras seguía en llamada y les dije que pegaran un sprint hasta mi portal para meterlas y escondernos antes de que miraran por donde se habían metido. No se pudieron ir porque mirando desde la ventana vimos que se habían quedado por la zona dando vueltas para que al final cuando vieron luces de Policía se fueran como si nada”.

- “Lo que me da más impotencia es escuchar cómo se ríen o el hecho de insultarnos o denigrarnos por no darles bola y que se sientan superiores por hacer eso. Claro está que al final tampoco puedes hacer mucho más que esperar a que se vayan porque no quieres meterte en algún lío si les vas a contestar, por miedo a que se pongan violentos o se encisquen aun más en no dejarte en paz”.

-“Incluso entre mujeres se me ha insinuado que viajar sola o ir a conciertos y que los niños se quedaran con su padre era una falta de responsabilidad. También en ocasiones (cuando era jovencita) he sentido miedo a regresar a casa de noche. Creo que también estamos algo sugestionadas”.

- “He sentido que hoy en día hasta las propias mujeres se atacan unas a otras... Ya ni me sorprende de los hombres, los hay muy buenos y que son un trozo de pan como personas, pero desgraciadamente ya sea de noche o de día, andando o trabajando, se permiten vejaciones, comentarios, o incluso intentar meterte mano hasta en plena calle cuando pasas, que te suelten comentarios groseros, sexistas, es horrible... Eso de no poder ni andar sin sentir que tienes unos 'ojos pegados a la nuca'”

- “Cuando eramos jóvenes muchísimas veces éramos perseguidas por hombres, en concreto había un hombre que varias veces nos miraba desde lejos mientras se masturbaba. A mí particularmente en una ocasión un chico me intentó asustar impidiéndome cerrar la puerta al entrar a un baño de un bar y así millones de cosas que podíamos haber denunciado y no lo hicimos por desconocimiento. Solo espero que poco a poco estas situaciones acaben y que ni mi hija ni ninguna otra mujer tenga que vivir este tipo de abusos en un futuro”.

- “En un bar me rodearon unos 8-9 chicos y me metieron mano, incluso alguno por debajo del pantalón, mis amigos lo vieron empezaron a discutir y nos echaron a nosotros del bar”.

- “Y ya sin hablar cuando se junta un grupo de chicos y hablan sobre las mujeres como objetos, es de chiste oírlos. Todavía queda mucho por lo que luchar”.

- “Me drogó un amigo y me llevó a casa a aprovecharse de mí. Mi pareja estaba en casa y el tío se fue, si no hubiera estado no sé qué habría pasado”.

- “En mi opinión, se han tumbado barreras con respecto a la mujer en la sociedad, pero aún faltan muchas, muchísimas por tumbar. En el trabajo, en casa, en el ocio.... Y por supuesto con respecto a la 'conciliación'. Aún tenemos una muralla muy muy grande. Hace poco oí una frase a un pediatra, las mujeres no concilian, sacrifican. ¡Verdad verdadera!”

- “Volver por calles principales, nunca secundarias. Ir a comprar algo importante (un coche) y que automáticamente le hagan caso a mi padre, cuando me lo iba a comprar yo con mi dinero y mi padre solo pasó a acompañarme”.

- “Es triste que a mis años me dé miedo venir sola a casa a ciertas horas. En dos ocasiones me han seguido por la calle diciéndome cosas como ... ven guapa, solo quiero hablar un rato, etc. En ese momento cogí el teléfono y les dije que estaba llamando a la Policía. Se fueron en las dos ocasiones”.

- “Me han perseguido hasta casa, me han gritado cosas por la calle y me han juzgado en el trabajo. Ser mujer hoy en día todavía es muy duro”.

-“Un buen amigo ,eso creía yo ..se convirtió en una pesadilla. Resultó que camuflaba otra persona por dentro. Desde ese momento aparte de perder mi confianza, me dejó sumida en un miedo constante, derrotada, engañada, maltratada, insultada, amenazada y con miedo constantemente de día y con pesadillas por la noche. Nunca pensé que yo, que siempre me he considerado una persona fuerte, pudiera convertirme en alguien tan frágil”.

- “Ir por la calle. Meterme a mi portal. Confirmar que la puerta del portal estuviera cerrada porque pensé que podrían seguirme. Efectivamente, me seguía un chico, quiso entrar al portal y no pudo. Me fijé que mientras entraba al ascensor, él se hacía una paja mirándome agarrado a la puerta del portal. ¡Rápido me metí al ascensor y le di al botón! Entonces tenía 15/16 años”.

- “Ir a por el coche, sentirme perseguida, tener que rodear, acelerar, esperar y llamar a una amiga hasta despistar al individuo”.

- “Soy técnico informático, cuando he ido alguna vez con un compañero de trabajo, y han visto que la que iba hacer el trabajo era yo, o que ambos lo íbamos a ejecutar, me miraban y miraban a mi compañero incrédulos. Mas de una vez mi compañero ha tenido que poner en conocimiento que yo era tan válida como él y que tenía mis correspondientes títulos para ejercer mi trabajo”.

-“Fui ahogada por mi propio hermano por no querer callar lo que estaba pensando. Causé un gran problema para mi familia (la Policía intervino) y hasta tuve que pedir perdón por algo que yo considero un derecho (la opinión personal)”.

- “En mi anterior trabajo que tenía un cargo de cierta responsabilidad que fui adquiriendo a lo largo de cinco años. Cuando comuniqué que estaba embarazada me dijeron literalmente que dada mi situación actual no podía cumplir con las necesidades que tenía la empresa ni dedicar el tiempo que requería mi puesto y que si quería seguir me podrían pasar a recepción... Como no me quedé callada el impresentable de mi exjefe que físicamente imponía bastante, 1.85 y 120 kilos, dio un puñetazo a la mesa que tembló el edificio y me dijo también literal que le jodía largarme porque tenía pelotas pero que en mi puta vida se me ocurriera decirle que no iba a consentir.... Hoy cinco años después tengo una hija preciosa y un trabajo estupendo porque sí es posible con esfuerzo conciliar”.

- “En una ocasión me siguió un desconocido mientras se masturbaba mientras me decía que yo en el fondo quería tocarle y hacerle 'cosas' porque 'yo iba a disfrutar' con él. Ocurrió una noche de viernes, al volver a casa tras salir de fiesta”.

- “Siempre me pasa de ir con un chico a un bar pedir un café y una caña y siempre el café ponérmelo a mí y la caña al chico....y lo de conducir por ser mujer, miles de veces el típico comentario de 'mujer tenías que ser'...”

- “Me agredieron sexualmente cuando tenia 6 años o menos, en el colegio, un niño de 2 años mas que yo”.

- “Todavía paso miedo por la calle al volver a casa por la noche, siempre voy con el móvil en la mano y últimamente prefiero pagar un taxi”.

- “Mi jefa no quiso renovar mi contrato por el hecho de que me acababa de casar y seguramente querría ser madre pronto (algo que en ese momento no estaba en mis planes)”.

- “Cuando una mujer rechaza a un hombre es porque está amargada o porque es una frígida, no entienden que simplemente no queremos hacer nada con ellos”.

“- Me acosaron en un ascensor, preguntándome cosas y alardeando de coches y dinero... no quería ser su amiga ni quedar con el chico, me insultó y no me dejaba salir del ascensor. Cuando le dije que iba gritar, se fue. Era un trabajador de pisos de reformas que había contratado la vecina”.

- “Una noche iba al encuentro de mis amigos para ir a cenar, se me acercaron dos chicos y uno de ellos me dijo al oído: - Porque hay gente. Si no, te violaba......”

- “Otra vez quedé con un chico para conocernos, íbamos paseando por el parque del Ebro (en plena tarde de verano, concurrido con gente) y empezó a tocarme la zona íntima. Salí corriendo obviamente llamando por teléfono a una amiga”.

- “Con mucha frecuencia se resta importancia a situaciones de acoso porque no se ha llegado a producir la agresión sexual física. Las víctimas no somos reconocidas como víctimas porque 'no llegó a pasar nada', lo cual nos sume en un proceso interno muy doloroso, donde tenemos la falsa sensación de ser afortunadas porque 'me libré', estamos vivas y no nos han penetrado; pero a la vez sentimos rabia por la alienación que ha supuesto, por la injusticia, por la impotencia; miedo; y culpabilidad, por sentir esa rabia/miedo sin que haya pasado nada”.

- “Un profesor mío me escribió a mi número privado de teléfono porque lo buscó y siempre que puede, intenta darme conversación de cosas ajenas al colegio”.

- “Lo peor de todo es que mi hija sufre más agresiones y tiene más miedo que yo. Hemos retrocedido en algunas cuestiones”.