El pueblo de Villarroya volvió a acaparar la atención este pasado domingo al volver a ser una vez más el municipio más rápido de España en cerrar las urnas. Exactamente 26 segundos tardaron los siete electores censados en completar la votación, cumpliendo su propio record que habían establecido el pasado 28 de mayo en 29 segundos.
Los vecinos y vecinas de Villarroya tienen práctica y saben perfectamente cómo hacerlo para ser los más rápidos y ocupar su espacio en toda la prensa nacional e incluso internacional, pero esta vez ha habido fallos.
En el vídeo publicado en las redes sociales del diario El País puede verse como la segunda votante entrega un DNI al presidente de la mesa en el que puede verse la fotografía de un hombre con bigote, que claramente no es la misma persona que vota.
Además, el último votante mete dos papeletas en la urna del Senado. Este error se detectó al abrir la urna y comprobar que había una papeleta de más. Podría parecer inicialmente una irregularidad pero pronto se descubrió que había sido un error fruto de las prisas. Al meter la papeleta en la urna, cayó sobre la mesa el sobre que tapa la misma. Con las prisas, un miembro de la mesa creyó que se trataba de la papeleta del voto y se la entregó al vecino, que volvió a meterla en la urna.
Fue fácil de detectar el error porque estos sobres que se utilizan para tapar las urnas van debidamente sellados.