Formarán una inmensa rueda alrededor de un lazo blanco. En silencio y con velas encendidas en solidaridad con las 56 mujeres asesinadas por sus parejas o ex parejas en lo que va de año. Se trata de la Rueda de Hombres contra la Violencia de género en La Rioja, último acto de las VII Jornadas Sociológicas Género y Masculinidad, que empezaron el pasado lunes en la Universidad de La Rioja.
Se trata de fomentar la igualdad y no sólo desde los movimientos feministas sino también, desde la acción de los hombres que repulsan las relaciones desiguales entre hombres y mujeres que generan violencia y casi siempre, muerte.
Joaquín Giró, profesor de Sociología de la Universidad de La Rioja, organiza estas jornadas que tienen como ponentes al Fiscal General de La Rioja, Juan Calparsoro, Ander Bergara del Instituto Vasco de la Mujer o Manuel Buendia, de la Asociación de Hombre por la Igualdad de Género. Son ellos quienes ponen cara y rostro a los miles de hombres que se solidarizan con la lucha de las mujeres y que condenan y abogan por erradicar una terrible lacra, la violencia machista, que daña a todos los integrantes de las sociedad por igual.
Los roles establecidos por una país de cultura machista e influidos también por la religión católica favorecen la aparición de los comportamientos sexistas. ¿Se puede hacer algo para evitar el asesinato de mujeres por sus parejas? Joaquín Giró asegura que la violencia más terrible termina en el asesinato que pero que todo ello es mucho más que un golpe, una paliza, existe la violencia psicológica que deja heridas menos perceptibles pero que es tan aniquiladora como la física.
La violencia siempre ha existido, pero ahora es más visible, más certera. Giró argumenta que los cambios en los roles familiares son cada vez más patentes. Y eso que no se ha producido ningún mandato legal que los motive. Hemos pasado del rol patriarcal, de la dominación del hombre sobre la mujer, del machismo, de la familia convencional a un profundo cambio en las relaciones entre hombres y mujeres. Hay nuevas formas de familia y sobre todo la incorporación de la mujer al mercado laboral ha provocado un cambio que no todos los hombres son capaces de asumir. “No son capaces de adaptarse ya que han sido educados en el machismo y en la dominación a la mujer y todo ello se convierte en tensión y en violencia”.
El Fiscal General de La Rioja, Juan Calparsoro, aseguraba en su ponencia que durante todos los años que ha ejercido su cargo ha habido un gran número de denuncias por violencia machista. La Rioja, en proporción de población está muy igualada con el resto de comunidades autónomas.
MUJER E INMIGRANTE: DOBLA DRAMA DE VIOLENCIA DE GÉNEROEl 40% de las mujeres asesinadas por sus parejas eran inmigrantes
. Una doble problemática porque al horror de padecer los malos tratos se une el desconocimiento de la ley e incluso del idioma o el aislamiento de mujer extranjera. Giró recuerda que en muchos casos, las mujeres y los hombres extranjeros provienen de lugares donde el machismo es la cultura dominante. Es el caso de las mujeres latinoamericanas, una situación que se refleja, por ejemplo, en el ya conocido como 'feminicidio' de Ciudad Juárez.
La cuestión está en la educación, en la concienciación de las siguientes generaciones, más preparadas, más libres, más cómodas para no aceptar la dominación de un sexo sobre otro. “Nosotros no lo veremos” sentencia Giró, “faltan una o dos generaciones, llegará un día en que esa desigualdad ya no exista”.
Para ello, la planificación de las administración, la educación en las aula, pero también en las familias es fundamental. Aunque en ocasiones, el foco de atención mediática sentencia la lucha contra la violencia de género. Un ejemplo es el conocido como 'caso Neira'. “Todo lo que venga de los programas basura, de los medios amarillistas distorsiona el maltrato, lo banaliza, da un protagonismo excesivo al maltratador y la víctima porque ese tipo de informaciones busca las vísceras del suceso”. Para Giró el caso Neira ha sido fatal para la lucha contra la violencia doméstica y confiesa que “aunque el señor Neira también es para darle de comer a parte”.
Por todo ello y para demostrar que la guerra contra el agresor y contra la tragedia de los asesinatos por razones de género, hoy a las 19.30 horas en el Plaza del Ayuntamiento, los hombres riojanos, los que sí aman, cuidan y respetan a sus compañeras, se concentrarán alrededor de un lazo blanco para decir, en silencio, NO a la Violencia de Género.