La Coordinadora de Plataformas en Defensa del Territorio, en representación de varias plataformas y colectivos, ha convocado una manifestación este próximo viernes en Logroño, en la que protestarán contra la puesta en marcha de macroproyectos eólicos, bajo el lema “Estáis matando al mundo rural”.
En la iniciativa están implicadas, en concreto, la Plataforma por el Progreso Sostenible de las Tierras Orientales de La Rioja, Plataforma por el Desarrollo Sostenible del Alto Cidacos, SENDA (Sostenibilidad Energética y Desarrollo Agrario) y Paisajes y Viñedos.
La marcha partirá a las 19 horas desde Glorieta del Doctor Zubía, para recorrer las calles Portales, Sagasta, Bretón de los Herreros, María Zambrano, Avenida de Portugal y Miguel Villanueva, para finalizar en la Concha de El Espolón.
En este punto al final de la manifestación se procederá a la lectura de un manifiesto, “instando, nuevamente, al Gobierno de La Rioja a la aprobación de una moratoria que ponga fin a los proyectos en curso, proteja el conjunto de las comarcas riojanas y fomente planes de desarrollo sostenibles, ajenos a macroproyectos eólicos, fotovoltaicos u a otras ingentes infraestructuras agresoras que tienden a eludir una adecuada planificación territorial”.
Asimismo, se abogará “en pro de resoluciones que propicien la dinamización y protección de nuestros pueblos, ecosistemas, modos y medios de vida, siempre coherentes con la rica diversidad existente en nuestra región”.
La manifestación adoptará el formato de representación activa simbólica teatralizada (performance dinámica). Constará de dos partes claramente diferenciadas, en primer lugar, un “hipotético funeral del mundo rural, aquel al que se le pretende condenar desde los magnos poderes económicos y gubernamentales; interesados, como están, los primeros y proclives, como son, los segundos a la transición energética extractiva a gran escala”.
Y, como segunda parte, “la resistencia de la población que habita ese mundo rural: un mundo histórico, solidario, subsistente y proveedor de bienes a nuestra actual sociedad; abundante en recursos materiales e inmateriales; responsable, que mira hacia adelante, comprometido con un modelo de transición energética participativa y distribuida, e íntimamente ligado al paisaje, el territorio, la biodiversidad, el patrimonio y la memoria colectiva, bienes que defiende mientras trabaja”.