El entrenador del Real Madrid, José Mourinho, ha restado trascendencia a las palabras del presidente del FC Barcelona, Sandro Rossell, que apostó por una victoria 5-0 de su equipo en la final de la Copa del Rey, aunque sí considera que si hubiera sido él quien hubiese dicho estas palabras iría “a la cárcel”.
“No le escuché, pero lo he leído esta mañana. Para mí es normal, si es su opinión o sensación por qué razón no lo puede decir, no me parece que haya faltado al respeto a nadie”, recalcó.
Incluso no cree que esas palabras sirvan para motivar a sus jugadores. “A lo mejor para motivar a los del Barcelona, a los del Madrid no, que tienen sus propias motivaciones. Trabajan cada día y quieren ganar cada partido, no ganan siempre, pero no necesitamos de palabras de otras personas para motivar”, explicó.
Además, aseguró que le parece que esas palabras sean criticables. “A lo mejor piensas que estoy jugando defensivamente o hago comentarios que no están de acuerdo con mi modo de pensar, pero la verdad es que para mí no ha dicho nada del otro mundo, es su convicción, su sensación, su confianza en su equipo y ¿por qué no lo puede decir?”, dijo.
“Si soy yo el que lo digo voy a cárcel. Pero no veo nada de negativo. ¿Cuál es el problema de decir que piensa que va a ganar?, o que piensa que va a ganar de cuatro o de cinco. ¿Cuál es el problema?, problema ninguno”, repitió.
Por otra parte, eludió referirse al Villarreal-FC Barcelona --“tenemos que hacer lo nuestro, nada más”-- o a lo ocurrido esta semana con el posible paro liguero. “No es lo mío, son problemas políticos, de los clubes. Pasa eso en todos los países. No es un drama, estaba con miedo de no saber hasta hoy si se jugaba o no mañana, pero me lo dijeron el martes por la noche y no hubo problema”, expresó.
“TENEMOS VISIÓN DE FUTURO, SOMOS UN EQUIPO JOVEN”
En otro orden de cosas, reiteró su habitual argumento cuando se le cuestiona por su proyecto a largo plazo en el Real Madrid: “Este es un equipo es el más joven no sé si de la historia, pero sí de los más jóvenes de Europa. Si no tiene visión de largo plazo... ¿quién lo va a tener?”.
“Tenemos visión de futuro porque en este equipo sólo Carvalho tendrá que acabar su carrera en tres o cuatro años, los otros están para mucho más años e incluso creo que Carvalho también podría. Somos un equipo de futuro, mi contrato es de cuatro años. El contrato no significa mucho, lo que significa es estar bien y mientras así sea no tengo razón para marcharme”, repitió.
Finalmente, se refirió al atractivo derbi de Milán que se disputa este fin de semana, elogiando el 'fair-play' que se vive entre las aficiones. “Quizá la gente no lo sabe fuera de Italia, pero un derbi Inter-Milan tiene una atmósferta muy positiva. Las aficiones nunca han creado problemas de violencia. La gente va junta al estadio, cada uno con su camiseta....”, comentó.
“Es un derbi muy muy bonito y esta vez es diferente porque en las últimas no se jugaba por el 'scudetto', como va a suceder mañana, no lo puedo ver, me gustaría mucho. Lo veré después”, concluyó.