Unos 23 combatientes talibán murieron la madrugada de ayer durante una operación del Ejército afgano y las fuerzas extranjeras en el distrito de Tirin Kot de la provincia de Uruzgán, en la zona meridional de Afganistán, según informaciones del comandante afgano Sher Mohamad Zazai.
En la misma jornada, en el distrito de Zhari, de la provincia de Kandahar, la policía afgana ha matado a cuatro insurgentes y ha herido a otros tres durante enfrentamientos entre ambas fuerzas, según ha comunicado en Ministerio del Interior del país.
Por otra parte, la OTAN ha declarado que miembros de una de sus patrullas han causado la muerte de un civil afgano que se dirigía hacia ellos y no paró cuando se lo ordenaron. Estos hechos ocurrieron cerca del distrito de Babaji, en Hermand.
Otro suceso con víctimas mortales en las últimas horas en Afganistán ha tenido lugar en la provincia de Zabul, donde los milicianos mataron a tiros a un oficial de policía y a su guardaespaldas en la capital provincial, Qalat. El gobernador de Zabul, Mohamad Ashraq Nasiri, confirmó estos hechos y agregó que, en el distrito de Arghandab, cuatro insurgentes talibán murieron en un enfrentamiento tras tender una emboscada a una patrulla del Ejército afgano.
En Afganistán, la violencia se ha multiplicado desde hace dos años pese a la presencia de casi 90.000 soldados de las fuerzas internacionales que tratan de contrarrestar las victorias de los milicianos. El sur de Afganistán es el centro de la insurgencia talibán, que ha cobrado fuerza en los últimos tres años.