Al menos ocho miembros del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) murieron esta tarde en dos ataques del Ejército israelí en el sur de la Franja de Gaza, según un nuevo balance del grupo radical. El Ejército israelí ha confirmado el ataque, que se produjo un día después del atentado suicida perpetrado ayer en Dimona, en el sur de Israel, que causó la muerte de una mujer y fue reivindicado por Hamás.
Seis de los militantes de Hamás murieron en un ataque aéreo israelí contra posiciones del movimiento y los otros dos por disparos de los soldados cerca de la frontera con Egipto. El Ejército israelí ha asegurado que el objetivo era responder a los lanzamientos de cohetes palestinos contra territorio hebreo.
Los responsables de seguridad de Hamás indicaron hoy que han ordenado a sus miembros que tomen “todas las precauciones posibles”, incluida la desconexión de sus teléfonos móviles, que pueden servir de guía a los 'drones' (aviones no pilotados) israelíes que rutinariamente sobrevuelan Gaza.