Varios miles de “indignados” han accedido durante la noche del viernes a la Puerta del Sol de manera pacífica y han celebrado una asamblea tras la que se han disuelto sin que en ningún momento fuera necesaria la intervención de la policía.
Durante la reunión han recordado las actividades previstas para el fin de semana, que consisten, entre otras, en la celebración del segundo foro social “intercalles” convocado a las ocho de la tarde de este sábado en los alrededores de la Puerta del Sol.
Además, han propuesto acudir mañana a las doce y media del mediodía a los juzgados situados en la Plaza de Castilla para esperar la puesta en libertad de los detenidos el jueves. En los próximos días, miembros del movimiento 15-M informarán sobre las actividades y propuestas que tienen previstas de forma provisional, lo que harán provisionalmente en la Puerta del Sol hasta que consigan la infraestructura necesaria para restablecer un punto de información permanente, según han aclarado en la asamblea.
El tráfico de vehículos por la céntrica plaza madrileña se encuentra restablecido y los coches y autobuses circulan con total normalidad. Poco antes de acceder a la Puerta del Sol, los indignados han vuelto a concentrarse ante el Ministerio del Interior para protestar por la carga policial de anoche, en una jornada que ha transcurrido sin incidentes y en la que la madrileña Puerta del Sol ha vuelto a abrirse al público.
Un fuerte cordón policial ha custodiado el Ministerio del Interior, situado en el Paseo de la Castellana, una de las principales vías de la ciudad, previendo posibles altercados como los sucedidos ayer, sin embargo, los indignados se han limitado a obedecer a los agentes y no pasar de una determinada zona.
Han leído un manifiesto y uno de los heridos a causa de la carga policial de ayer ha enseñado varios rasguños que tenía en la espalda y ha señalado que duda que resultara herido también algún agente de la Policía. Tras estar cerca de media hora frente al Ministerio, los manifestantes han puesto rumbo hacia la Puerta del Sol, símbolo del movimiento, y origen de la reactivación de las protestas, después de que el pasado martes la Policía desalojara a los indignados que permanecían acampados en la plaza.
En la mañana del viernes, por primera vez desde el nacimiento del movimiento del 15-M, los indignados han ofrecido una rueda de prensa en la que han solicitado la dimisión del ministro del Interior, Antonio Camacho y de la delegada del Gobierno en Madrid, Dolores Carrión, por la carga policial que se produjo la pasada noche.
El abogado Juan Rubiño, miembro de la Comisión de Legal de la Acampada Sol, ha señalado que la manifestación contra la que cargó la Policía era “pacífica” y que los agentes no dieron opción a que se disolvieran puesto que actuaron de forma “repentina” y “desproporcionada”.
Durante esa marcha, fueron detenidos cuatro jóvenes, entre ellos el redactor del diario digital Lainformacion.com, por lo que la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) y la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) han pedido a las fuerzas de seguridad que “extremen” el respeto hacia el trabajo de los periodistas y redactores gráficos.
Con los cuatro detenidos de ayer, ya son nueve los arrestados en los enfrentamiento registrados en los últimos días en la capital entre los “indignados” y la Policía, de los que dos de ellos, según la delegada del Gobierno en Madrid, tienen antecedentes por robo con violencia, robo con fuerza en las cosas, intimidación, resistencia y desobediencia y utilización de la violencia.
Las reacciones políticas a los incidentes no se han hecho esperar y, así, el candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha defendido la actuación policial y ha argumentado que “200 personas no pueden poner patas arriba una ciudad”.
Por su parte, el PP, a través de su vicesecretario general del PP, Esteban González Pons, ha respaldado a la Policía y ha acusado directamente al Ministerio del Interior de “obligarla cuando no debe y a no actuar cuando debe”. El diputado de IU, Gaspar Llamazares, ha pedido la comparecencia de Antonio Camacho en el Congreso para que explique la “represión policial”.
Según el consejero madrileño de Economía y hacienda, Percival Manglano, los comerciantes de la zona han sufrido pérdidas de en torno a los 60 millones de euros.