El presidente estadounidense, Barack Obama, dijo este martes que podría incluir algunas ideas republicanas en el proyecto de reforma sanitaria, mientras los congresistas demócratas se preparan para aprobarlo sin el respaldo republicano.
Obama dijo que “examinará” las propuestas de investigar a los proveedores de servicios sanitarios que reciban dinero federal, extender las cuentas de ahorro sanitarias, ofrecer más fondos para estudiar alternativas a demandas por negligencias médicas y aumentar los reembolsos de los médicos por Medicaid, el programa sanitario federal para los pobres.
“He dicho a lo largo de todo este proceso que seguiría aprovechando las mejores ideas de ambos partidos, y estoy abierto a estas propuestas en este espíritu”, manifestó Obama en la carta, dirigida a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi; al líder de la mayoría demócrata del Senado, Harry Reid; y a los líderes republicanos en ambas cámaras, al senador Mitch McConnell y al representante John Boehner.
Está previsto que Obama desvele el miércoles su plan para lograr la aprobación en el Congreso de la discutida reforma sanitaria. Entretanto, los congresistas demócratas se están preparando para utilizar un proceso conocido como reconciliación que permite la aprobación en el Senado por mayoría simple.
Esa fórmula, que sólo se puede utilizar para cuestiones relacionadas con el presupuesto, serviría para evitar una votación que requiere 60 de los 100 votos del Senado. El proceso de reconciliación sólo requeriría 51 votos. La pérdida de la 'supermayoría' -60 escaños- en el Senado ha dejado al Partido Demócrata en una posición complicada para sacar adelante la propuesta de Obama en solitario.