La sexta ola del coronavirus nos ha pillado en vísperas de Navidades, lo que ha provocado una avalancha de cancelaciones de cenas de empresa o de grupos de amigos y amigas en La Rioja. El miedo a contagiarse y a contagiar a la familia lleva a suspender o posponer estos encuentros, lo que se está notando mucho en la hostelería.
“Todos los días hay cancelaciones o baja el número de gente prevista, porque hay personas que ya no quieren venir o porque han dado positivo”, lamenta Beatriz Martínez, de Wine Fandango y Aitor Esnal.
Y es que esta era la semana más fuerte con respecto a comidas y cenas de grupos y las cancelaciones superan el 50% en numerosos establecimientos. Este viernes, por ejemplo, en Wine Fandango han pasado de cien comidas y cien cenas reservadas a cincuenta en cada caso. Sí que esperan contar con parejas o grupos pequeños. “Al final se terminará llenando igual, pero ya teníamos la previsión de compras para toda la semana con los menús de grupos”.
En otros puntos como el Hotel Victoria de Arnedo las anulaciones llegan incluso al 100%. “La mayoría de celebraciones se están cancelando, en torno a un 95%”, explica Demetrio Domínguez, quien detalla que este fin de semana tenía hasta 15 cenas de quintas y, de momento, sólo queda una.
“Esto supone un retroceso, una paralización muy importante en plena temporada alta”, detalla Domínguez. Son cancelaciones que suponen, además, una cascada de anulaciones en carnicerías, pescaderías, peluquerías o contratación de personal.
Lo que se mantienen son las reservas para Reyes o para después de Navidades. “La gente quiere reservarse ahora para poder juntarse con la familia sin miedo y esperan a que pase la Navidad para quedar”. No obstante, la hostelería mira el futuro más próximo con prudencia. “Yo voy día a día, no hago previsiones de compra o contrataciones a largo plazo, no puedo arriesgar”, concluye Domínguez.