Se desconoce si el presidente interino, Laurent Gbagbo, se encuentra en el complejo presidencial mientras las fuerzas fieles a Outtara han cercado el edificio en una ofensiva que pretende cercar a los seguidores del presidente interino, que se niega a abandonar el poder.
París, ante esta situación de inseguridad, se ha apresurado a conocer sobre el terreno cuál es el estado del conflilcto dado que en Costa de Marfil residen 12.000 franceses. Tanto es así que Nicolás Sarkozy ha autorizado a sus soldados, bajo mandato de la ONU, a abrir fuego contra los seguidores de Gbagbo si estos atacan con armas pesadas. No en vano, dos franceses, entre otros extranjeros, se encuentran secuestrados por los fieles al presidente salienteen las instalaciones del hotel Novotel, de Abiyán.
Además, desde EEUU, Barack Obama ha reiterado que el mandatario interino debe abandonar el poder para poder estabilizar la situación política.
Obama ha dialogado también su homólogo de Gabón, Alí Bongo Ondimba. Ambos, en conversación telefónica, han expresado su “preocupación” por los hechos y la actual situación de violencia que se vive en Costa de Marfil. Los dos coinciden en la necesidad de que “acabe cuanto antes” esta situación. Y es que el país se encuentra sumido en una crisis desde que se divulgaron los resultados electorales de las presidenciales en noviembre del año pasado. Los comicios arrojaron una victoria del lado opositor, el de Alassane Ouattara. Desde entonces, Gbagbo se niega a abandonar el poder y esto ha generado duros enfrentamientos entre partidarios de uno y otro. El balance, de momento, es de cientos de muertos y miles de desplazados.