El nuevo presidente del PSOE de La Rioja, José Ignacio Pérez Sáenz, asegura que no quiere ser el “protagonista” en esta nueva etapa de su partido y que no es el “tutor” del recientemente elegido secretario general, César Luena, al que prestará su apoyo en aquello que necesite.
“Aquí no quiero ser el protagonista. Hay que saber estar en los sitios y el líder del PSOE de La Rioja es César Luena”, subraya Pérez Sáenz (Calahorra, 1952) en una entrevista con Efe.
José Ignacio Pérez Sáenz, expresidente del Gobierno de La Rioja entre 1900 y 1995, reitera que él no es quien va a liderar el PSOE riojano y que el nuevo líder, Cesar Luena, sabe que está “para lo que quiera, menos para disputarle, obstaculizare u ocultarle su figura de liderazgo”. “No soy tutor de nadie”, apostilla.
Y asegura que Cesar Luena tiene “la suficiente personalidad como para no estar a la sombra de nadie”.
El presidente del PSOE de La Rioja ha expresado su pasión por la política, campo en el que se estrenó como concejal de su ciudad natal al ser elegido en las primeras elecciones democráticas de 1979, tras lo que fue presidente del Gobierno riojano (1990-1995) y senador por La Rioja entre los años 2000 y 2011.
Ha reconocido que intentará transmitir su experiencia desde la Presidencia del partido y actuar, si fuera necesario, como “mediador”, dado que cree que la cultura de las primarias aún no ha sido asimilada en su totalidad por los socialistas.
Pérez Sáenz señala que ante un cambio “siempre que hay una rivalidad para un determinado puesto, siempre se dejan algunas heridas, posiblemente innecesarias”, aunque ello no supone que se tenga que desechar el modelo.
El PSOE, en la actualidad, es la única organización política que lleva la democracia más ensayada a través de las primarias y hay que intentar mejorar el procedimiento, afirma Pérez Sáenz, para quien “las heridas se curan, seguro, y desde la dirección se harán todos los esfuerzos para que se olviden lo antes posible y para que todos se sientan cómodos” porque “hay que contar con todos”.
“El triunfo de César Luena no lo discuten los militantes”, asevera el presidente de los socialistas, entre cuyas funciones figura intentar “reparar” cualquier tipo de “quiebra” que pudiera avistarse.
Pérez Sáenz, quien desea ser un presidente “útil”, afirma, respecto a su regreso a la política riojana tras su etapa de senador, que “hasta cierto punto nunca” se ha ido ni se irá, si no que ha cambiado sus responsabilidades, además de que no se olvida de lo que ha sido.
Afirma que nunca se ha sentido una figura “decorativa”, que su papel ha sido activo y que no ha vivido de la herencia de ser el expresidente del Gobierno de La Rioja, porque asegura que de “la pasión política nunca” se dará de baja. “Imprime carácter”, subraya.
De la nueva Comisión Ejecutiva del PSOE Pérez Sáenz destaca el carácter integrador e intergeneracional, porque Luena, a su juicio, es consciente de que tiene que contar siempre con lo mejor.
Y, además, como dirigente histórico del partido, asegura que los jóvenes que llegan a hora al PSOE son herederos de una gestión “limpia, con acuerdos y desaciertos, pero limpia”.
El presidente de los socialistas riojanos defiende que el PSOE, aunque debe “adaptarse”, es un partido de gobierno, que tiene que mantener sus principios, sobre “una socialdemocracia reformadora”, porque lo “peor” que puede pasarle a su partido es, a su juicio, ser una fuerza política “inmovilista”.
Junto al presidente estará en el PSOE, por primera vez como vicepresidenta una mujer, Beatriz Arráiz, para quien Cesar Luena ha recuperado este cargo que estaba en desuso desde la década de los años noventa.
Arráiz, quien apoyará la labor de la Secretaría General y coordinará las distintas áreas del partido, asegura a Efe que asume este cargo con responsabilidad e ilusión y añade que su objetivo será ganar las próximas elecciones autonómicas y municipales.
Para ello, cree que es necesario recuperar la ilusión de los afiliados y votantes y ser un referente.