Según relata el escrito de acusación, la empresa tenía una máquina estropeada. En concreto, no funcionaba el radar que provocaba la parada inmediata al detectar obstáculos.
Sin embargo, sus responsables decidieron que continuara en funcionamiento, y simplemente colocaron un cartel que decía 'Cuidado con la máquina, no frena', y advirtieron a los trabajadores del riesgo.
Tras dos meses en esta situación, el 14 de noviembre de 2005, uno de los trabajadores, sin “formación preventiva”, fue alcanzado por detrás por la máquina, y se le quedó atrapada la pierna derecha.
Se le fracturó el peroné y tuvo “graves” lesiones musculares que precisaron de intervención quirúrgica, seis días de hospitalización y 186 de curación. Le han quedado cicatrices y el ochenta por ciento de pérdida de movilidad del tobillo.
Para el Fiscal, C.S.S y L.S.S, responsable de producción y gerente de la mercantil, son autores de un delito contra los derechos de los trabajadores y otro de lesiones.
En su escrito, apunta a que se decidirá en el juicio la indemnización, tomando como baremo el de los accidentes de tráfico.