PNV y EH Bildu han denunciado el “ruido político” y la “politización” que se está haciendo desde algunos ámbitos de la iniciativa Viñedos de Álava, cuando, a su juicio, solo responde a una decisión económica y empresarial de un grupo de bodegas de Álava. Por su parte, el PSE-EE ha calificado de “barbaridad” abrir “nuevas aventuras” en lugar de mantenerse en el “paraguas de Rioja”, al igual que el PP+Cs que tampoco ve entendible esta “operación política” mientras Elkarrekin Podemos muestra su respeto a este proyecto.
En una tertulia en Radio Euskadi, los parlamentarios vascos se han referido a la orden del Gobierno vasco por la que se aprueba la Denominación de Origen Protegida 'Arabako Mahastiak/Viñedos de Álava' y se concede la protección nacional transitoria, una decisión que será recurrida por el Consejo Regulador de la DOCa Rioja.
El parlamentario del PNV José Antonio Suso ha afirmado que lo ha hecho el Gobierno vasco es terminar una tramitación administrativa que empezó hace mucho tiempo y, si no lo hiciera, estaría cometiendo prevaricación.
A su juicio, se está haciendo “política donde solo hay un problema económico”. “Si el 1,6% (de bodegas) es el problema, no sé para qué le dan todo este ruido que le dan, más allá del ruido político hacia los independentistas y nacionalistas vascos, que eso en La Rioja tiene muy buena venta”, ha asegurado.
El representante jeltzale ha explicado que la iniciativa de Viñedos de Álava responde a que pequeñas bodegas de Álava están viendo a lo largo de años como han aumentado los costes y ha bajado el precio de la uva -un 30% por debajo de 2002 o 2003-, de manera que no se les está dando la rentabilidad que necesitan para “una vida digna”.
“Hay viticultores que entienden que necesitan un proyecto diferente, que les permita la rentabilidad, de ahí nace Viñedos de Álava, no nace de las instituciones”, ha manifestado.
Según ha precisado, el PNV defiende un modelo como el de Burdeos, que incluye a 50 denominaciones de origen, o el de Burdeos a 150, por lo que plantean una denominación de Rioja alavesa dentro de la Rioja.
José Antonio Suso ha asegurado que se está ante un proyecto empresarial por parte de unas bodegas que entienden que su rentabilidad no está asegurada y buscan otras alternativas. En este sentido, ha lamentado que se esté politizando este tema tratando de trasladar que algunos partidos se dedican “a disgregar problemas y crear problemas donde no los hay”.
CASANOVA
Por su parte, el parlamentario de EH Bildu, Iker Casanova, cree que es un tema que se está politizando “de forma extrema” pero por parte de quienes están negando esta iniciativa “por razones políticas”.
Según ha afirmado, Viñedos de Álava es una decisión que parte del sector donde hay productores de vino que creen que necesitan “más control sobre la gestión de su producto y una diferenciación propia”.
Por lo tanto, ha asegurado que es una decisión “técnica” relacionada con la rentabilidad“ ”que algunos están intentando convertir en la guerra de la independencia“. ”El nacionalismo español vuelve a frivolizar y vuelve a poner por encima de la calidad de vida de los productores de vino alaveses sus proyectos de bandera“, ha afirmado.
Casanova cree que quienes están haciendo “una guerra que está poniendo en peligro un proyecto que empresarialmente y económicamente puede ser beneficioso para el producto del vino vasco son otros y son los que deberían dar explicaciones y a los que cabe exigir responsabilidades si se cortocircuita un proyecto que puede ser bueno para el campo vasco”.
El parlamentario de la coalición soberanista ha insistido en que Viñedos de Álava es una iniciativa “legal” que tiene una justificación por parte de bodegas que “están jugando con su dinero” y que no cree que se metan en “aventuras frívolas por cuestiones extraeconómicas”.
Casanova ha indicado que son otros lo que quieren “insultar, descalificar, recurrir y cortarles las alas” por buscar un “producto diferenciado”. Por ello, ha pedido respeto y que paren esas “descalificaciones y agresiones” que provienen del “nacionalismo más rancio en nombre de no sé que unidades impuestas”.
PSE-EE
Por su parte, el parlamentario del PSE-EE Alberto Alonso ha asegurado, por una parte, en relación al procedimiento administrativo, que, “si se ajusta a la ley”, no hay manera de “parar ese expediente” y las instituciones lo tienen que seguir tramitando.
No obstante, considera que hay otra dimensión que es “política” y, en este sentido, ha manifestado que, en este momento, de “dura crisis”, en el que el sector se ha visto afectado por el Brexit y por la salida del mercado ruso, es importante “ir unidos y bajo el mismo paraguas”.
A su juicio, la lógica apunta a mantenerse dentro del “portaviones” de La Rioja y considera “una barbaridad” abrir “nuevas aventuras” cuando se puede estar poniendo en riesgo, “al menos, la cosecha de un año de muchos productores porque no se sabe dónde va acabar”.
Alberto Alonso ha afirmado que se pueden explorar “caminos de diferenciación” de los vinos de la Rioja Alavesa pero “dentro del portaviones de La Rioja”.
El parlamentario español ha asegurado que no es un tema de “nacionalismo español” o de “fractura de España”, sino que igual que se defiende que España se una a la UE “en otros temas”, aquí también apuestan porque la unidad porque se estará “más fuerte” ante los actuales “momentos turbulentos”.
Por su parte, el representante de Elkarrekin Podemos-IU Iñigo Martínez cree que existe “buen producto” a ambos lados del Ebro y tienen sus “diferencias y especificaidades”, además de existir un problema de grandes y medianas y pequeñas explotaciones.
Martínez ha mostrado su respeto al camino emprendido por Viñedos de Álava, que “no está exento de dificultades” y se ha mostrado favorable a que sea viable una denominación de origen Rioja donde se “abran caminos” para la “diferenciación” hacia los vinos de la Rioja alavesa y que no sean las grandes bodegas las que marquen todas las cuestiones.
Tras afirmar que se debe permitir a la bodegas pequeñas de Rioja Alavesa una “diferenciación propia”, ha apelado al diálogo para lograr esa diferenciación y especificidad de producto porque sería “lo mejor para todos y para la viabilidad de estas empresas y familias”.
DECISIÓN “ULTRAMINORITARIA”
Por su parte, el parlamentario de PP-Cs Carmlo Barrios cree que lo que está ocurriendo no tiene que ver con el tamaño de las bodegas y ha lamentado esta decisión tan “ultraminoritaria”.
Barrio ha criticado que se ponga en marcha esta operación “política” que “no tiene ningún sentido económico y comercial”. A su juicio, la diferenciación es “factible” pero “dentro del paraguas Rioja”.
Por ello, ha rechazado esta “operación política amparada” por las instituciones vascas de “plantar cara a una realidad de éxito” y ha añadido que el consejo regulador está “en su derecho de adoptar las decisiones jurídicas” en relación “con algo que le perjudica”.
Barrio ha reconocido que puede haber problemas que solucionar o mejorar pero no se puede “abrir una brecha o guerra de vinos” porque “no es entendible”.
Por último, ha pedido al diputado de Álava, Ramiro González, y a la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, que “sean más colaboradores” con el Consejo regulador y busquen soluciones a los distintos problemas que tiene el sector como el precio de la uva o la mejora de seguros agrarios.