¿Por qué una persona con criterio propio tiene que depender de un tercero para votar?

El próximo domingo 247.669 riojanos pueden votar, derecho que no podrán ejercer unos mil riojanos. Javier Muñoz es secretario del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad en La Rioja, CERMI y recuerda que este colectivo está en “permanente demanda”. De hecho, en los últimos días, y centrados en la próximo proceso electoral, unas 300 personas se concentraron frente al Congreso de los Diputados para exigir el derecho al voto de casi 100.000 personas con discapacidad intelectual, a las que un juez se lo ha negado, de las que aproximadamente 1.000 están en La Rioja, recuerda.

Pero además de las personas con discapacidad intelectual y enfermedad mental, apunta Muñoz, también queremos poner el acento en aquellas otras personas discapacitadas, las ciegas por ejemplo, que no pueden formar parte de las mesas porque el material no es adaptado y los apoyos tampoco son los suficientes, apunta Muñoz.

De hecho, desde este colectivo se asegura que “esto es una violación de los derechos humanos”. Ya que tal y como recuerda Muñoz, hay una convención de la ONU sobre el sufragio universal y el derecho a voto, convención que es de 2006 y que España ratificó en 2007, por lo que está obligada a cumplir. Estamos en 2016 y España sigue sin cumplir“. Desde el Comité se insiste en que ”España está en deuda con Naciones Unidas que le ha dicho que tiene que reformar su Ley Electoral, pero los sucesivos gobiernos y parlamentos no la han modificado“.

Para Muñoz, “hay un problema de procedimiento”. La Ley electoral, cuenta, es anterior a la propia convención de la ONU y “parece que cuesta un poco más”. “Nosotros abogamos por el voto electrónico porque así nos igualamos todos”. Y es que tal y como cuenta, “ahora mismo hay personas con discapacidad que tiene problemas pero las personas mayores también. Hay muchos colectivos que realmente lo pasan mal a la hora de ejercer su derecho y tienen que utilizar otros recursos, como puede ser la familia”.

Algo que censuran desde el CERMI porque “no entiendo por qué una persona con criterio propio tiene que depender de un tercero para ejercer su derecho al voto para que le busque la papeleta e incluso la meta en el sobre”, asevera. Por todo ello piden “el acceso al voto por parte de todos los colectivos y que la accesibilidad esté al servicio del derecho al sufragio de voto, que puedan acceder todas las personas”. Yo, por ejemplo, cuenta ejerceré mi derecho al voto en braille porque conozco el sistema, algo que no podrán hacer otros por desconocimiento.

Muñoz realizó esta entrevista, curiosamente, durante una visita al Parlamento Europeo. Invitados por la eurodiputada, Esther Herranz, reconoce que “es interesante que nuestro colectivo también pueda conocer las instituciones europeas porque Europa sigue siendo la gran desconocida”.