¿SE HA ECHADO EL EQUIPO HACIA ATRÁS CON EL 1-0?Lo hemos estado haciendo bien, apretando de puta madre. Ha sido una cosa puntual. Hemos empezado a pegar despejes para arriba... yo creo son cosas de los nervios y de la ansiedad, de la ilusión por devolver a la gente lo que nos está dando. Tenemos que saber competir con esa sensación de que el rival te puede empatar. Hay que saberse manejar. Si queremos crecer como equipo, hay que superar esas situaciones. El contrario no va a perder nunca, tienes que ser tú el que le ganes. En ese aspecto sí que nos falta un poso de experiencia, de manejar esas situaciones. Es cierto que el equipo es nuevo, joven, aunque llevemos tiempo trabajando juntos, pero muchos de ellos nunca han estado en esas circunstancias de estar arriba, que hay que manejarse de otra manera y jugar al corro de las patatas, saber cuándo hay que avanzar, irse al córner de vez en cuando.
¿JODIDOS POR EL RESULTADO?
El partido estaba absolutamente controlado y hemos cometido un error: no apretar bien una pelota, nos han superado en las disputas y nos han cogido excesivamente abiertos. No me importaba estar abiertos teniendo la pelota, pero hemos pecado de ingenuos. Les hemos dado esa oportunidad. La única oportunidad que han tenido, en un error nuestro, lo han aprovechado. Los resultados siempre son justos. No hay que lamentarse, mejorar y aprender.
¿CÓMO HA SIDO EL DESARROLLO DEL PARTIDO?
Nos ha faltado paciencia. Hemos metido demasiados balones diagonales demasiado pronto, sin haber tocado lo suficiente. La defensa estaba colocada. En la segunda parte lo hemos corregido, lo hemos hecho mejor. Hemos tenido pausa y momentos buenos en el juego, pero ha sido una pena. Lo que queda es el resultado. Analizar ese tipo de cosas... ahora es ventajista. Habrá quien diga que hemos estado fatal, pero cada uno tiene su lectura y hay que ser respetuoso.
¿SEGUÍA EL ENCUENTRO EL PLAN IDEADO?
Los cambios siempre se hacen para mejorar. No dejan de ser apuestas. A veces salen y a veces no. El partido lo hemos encarrilado todos y lo hemos empatado todos. No me parece justo apuntar ningún tanto por los cambios. Los que han estado han hecho su trabajo y los que han salido también. Cuando no ganas, suele pasar que los mejores son los que no juegan. Ese es el pensamiento de alguna gente. No le damos muchas vueltas a eso, hay que analizar lo que hemos hecho bien y lo que hemos hecho mal. A partir del martes, a pensar en el siguiente partido.