Prueba que te prueba. Así es la pretemporada. Pero además de las probaturas, Carlos Pouso le ha dado un cariz competitivo que invita al optimismo a una semana de que empiece lo bueno, la liga. Sobre todo a tenor de los resultados obtenidos ante rivales de superior categoría. De hecho, salvo la derrota inicial ante el Eibar (0-1) ha saldado este tipo de compromisos con nota: victoria ante el Bilbao Athletic (0-1) y empates frente Alavés (1-1, triunfo en los penaltis), Huesca (1-1) y Numancia (1-1). Ni en las mejores pretensiones.
Ante los sorianos el objetivo inicial, por lo visto en El Prao, era el orden, apostar por el 4-1-4-1 en defensa, dejar la pelota al rival, impedir la progresión por el centro y buscar las cosquillas a los de Jagoba Arrasate con rápidas transiciones. No en vano, una de las prioridades del técnico vasco era evitar la circulación del Numancia por dentro. Para ello, Jacobo Trigo daba equilibrio a una medular en la que Chevi, imponente con el cuero, y Pere Milla, algo perdido en los primeros compases, se hartaron de robar pelotas. El siguiente paso era encontrar un compañero al que dar la responsabilidad del ataque. Ahí emergió un Íker Alegre directo y valiente desde el costado zurdo. El asturiano parece estar de dulce y eso es una gran noticia.
Carlos Fernández se sacó la espinita de su última presencia en Laguardia, donde estuvo errático, para ser un peón más en el engranaje de los blanquirrojos. Pelea constante en los balones aéreos y referente ofensivo del que se pudieron aprovechar sus compañero. En la banda derecha faltó algo de llegada. Quizá que Pouso comenzara con Titi como lateral y Miguel Santos por delante impidió la profundidad. Un experimento que duró media hora y que dejó con mal sabor de boca al asturiano, el cual se veía superado en defensa -único lugar por el que el Numancia atisbó algo de peligro-. La zaga evidenció sobriedad. Con Borja, expeditivo y contundente, y Santelices como centrales y Paredes en el lateral.
Ocasiones para los blanquirrojos
Mimbres suficientes para que la diferencia de categoría no se acusara. Al contrario, el UD Logroñés mostraba más hechuras, sabía lo que quería y lo ejecutaba. Sólo faltaba el remate. Ahí anduvo desacertado. Íker Alegre, desde la primera jugada, demostró soltura. Un centrochut; un pase, infructuoso, sobre Pere Milla que le hubiera dejado con todo a favor; y un tiro desde la frontal que complicó a Ribas fue su repertorio en apenas 20 minutos. Borja, con un remate errático en el segundo palo, tras una falta lateral, y una buena triangulación Íker Alegre-Carlos Fernández-Chevi fueron dos avisos más de que la UDL quería ganar.
El Numancia, como perdido, con menos intensidad y brío, no sabía cómo romper la inercia. Ribas, su portero, estaba siendo demasiado protagonista. Pese a ello, los rojillos pudieron ponerse por delante en una doble acción. Mateu se encontró primero con el cuerpo de Miguel, mientras que el remate de cabeza de Álex Alegría, que cogió el rechace, fue despejado sobre la línea por el siempre ordenado Jacobo Trigo. Parecía que los sorianos se animaban y Vicente -que se marchó en los minutos finales al vestuario dejando a su equipo con diez- probó fortuna con un tiro que se fue elevado. Acciones esporádicas de un Numancia que, por momentos, dominaba el cuero pero con la sensación de que era lo que quería la UDL.
Salvo el cambio de Adirán León por Santelices a la media hora y del Julio Rico por Miguel Santos en el descanso, Pouso optó por ampliar el número de minutos de algunos de sus futbolistas. Eso permitió cierta continuidad durante la segunda mitad. El Numancia, quizá por vergüenza torera, imprimió algo más de velocidad y ritmo en sus acciones, aunque sin que el capitán Miguel tuviera que intervenir. Los blanquirrojos, a lo suyo, a esperar su oportunidad tras un robo. Así se quedó Íker Alegre en la frontal, sin pensárselo chutó y Ribas despejó. Carlos Fernández, muy atento, se anticipó para cazar el rechace, acomodarse el balón a la derecha y cruzar, raso y con un golpeo con el interior, ante la salida del meta rojillo.
Más posesión para el Numancia
El gol sirvió para que Pouso moviera el banquillo y recompusiera su equipo: Fermín en portería, Julio Rico, Herreros, Adrián León -igual es una apreciación personal, pero el cántabro aporta más en otras demarcaciones- y Arza en defensa; Birane Ba -gran detalle técnico con un regate con la cintura- como guardaespaldas de Guillermo y Joel Valencia -muy dinámico y peligros en las conducciones, además de trabajador en labores defensivas-, dejando a Míchel -de más a menos esta pretemporada- y Reguilón en las bandas y Jordan como punta de ataque.
El Numancia, tocado por el marcador en contra, apretó y aprovechó la juventud blanquirroja sobre el terreno de juego para adueñarse de la medular. Sin excesivo peligro, Fermín tenía que atajar una serie de balones y salir en un par de acciones por arriba. Fueron la antesala del empate. Golpeo en largo, peinada y Nacho, dentro del área, cruzaba para superar al meta riojano.
Restaba poco más de un cuarto de hora y parecía que los de Jagoba Arrasate buscaban la remontada. El UD Logroñés apretó los dientes y se fajó en las tareas defensivas, aunque sin renunciar al contragolpe, para hacer buenas las tablas. Un resultado lustroso, otro más, ante un equipo de superior categoría. Y este sábado hay más con el triangular que disputará el conjunto blanquirrojo en San Roque junto a Izarra y Alaváes B. Es de esperar que los minutos vuelva a repartirse, pero a la inversa de lo visto en El Prao. Asimismo, habrá que esperar si Camochu juega algún minuto porque en Laguardia no lo hizo.
UD LOGROÑÉS: Miguel (Fermín, min. 60); Titi (Míchel, min. 60), Borja (Herreros, min. 60), Santelices (Adrián León, min. 30), Paredes (Arza, min. 60); Jacobo Trigo (Birane Ba, min. 60); Miguel Santos (Julio Rico, min, 46), Chevi (Guillermo, min. 60), Pere Milla (Joel Valencia, min. 60), Íker Alegre (Reguilón, min. 60); y Carlos Fernández (Jordan, min. 60).
NUMANCIA: Ribas; Plaza (Antonio Tomás, min. 74), Regalón, Dani Calvo, Ciria; Nacho, Mateu (Natalio, min. 79), Íñigo Pérez, Vicente (Callens, min. 46); Aquino (Pablo Valcarce, min. 79) y Álex Alegría (Óscar Díaz, min. 79).
GOLES: 1-0, min. 59: Carlos Fernández. 1-1, min. 73: Nacho.
ÁRBITRO: Aitor González. Amonestó al jugador del Numancia Regalón (min. 46).
INCIDENCIAS: Unos 600 espectadores en el El Prao (Laguardia) en partido amistoso disputado entre el Numancia, que ejerció de local por ser el conjunto de mayor categoría, y el UD Logroñés.