Superior. Da igual que sea Copa del Rey, como era el caso, o Liga, como en duelos anteriores. Este UD Logroñés se gusta. Se deja querer por la afición y lo hace con goles, con oportunidades, corriendo hacia delante y también hacia atrás. No es el bloque de Carlos Pouso, por concepto, paciente, exquisito en el origen, pausado. Es ritmo, velocidad, desborde, emoción. Sin embargo aúna todo cuando lo individual y lo colectivo se entremezclan. Para eso ha llegado Muneta, para hacer cosas diferentes. Para jugar a un toque y oxigenar a sus compañeros. Para 'clavar' las faltas, marcar en su redebut y asisitir para que Birane Ba, con un sobresaliente remate en el primer palo, asegurara el pase a la tercera ronda, la última a un partido.
Esta vez pasó por Las Gaunas el Linares, pero daba igual el contrincante. Le es indiferente al conjunto blanquirrojo. Va a lo suyo. A Mandar. A ganar. Hay días que cuesta más que otros, pero este miércoles, salvo en el inicio con un rival que presionó muy arriba en el arranque pronto se evidenció que había mucha diferencia entre ambos equipos. El Linares, según su entrenador “muy cansado” ante el exigente calendario que le ha tocado en suerte -5 partidos en 20 días-, trató de dosificar esfuerzos, de no correr más de la cuenta, de ralentizar las acciones al máximo. Pero ahí estaba el UD Logroñés para meter adrenalina, para regodearse por los costados tanto con los extremos, Joel Valencia y el debutante Álvaro González, como con sus laterales, Edu Payá y Reguilón -con más recorrido y decisión que Paredes-.
El Linares estaba desbordado, pero seguía en pie porque Carlos Fernández no acertaba a rematar un sensacional centro de Joel Valencia desde la izquierda y porque Jacobo Trigo -lo demostró nada más comenzar el segundo tiempo- no anda fino en el remate, tampoco es su labor. Apareció entonces Muneta. Ese jugador que iba habilitando a sus compañeros, ese ilusionista que hace que el fútbol parezca sencillo de ejecutar. Sin dudas. Golpeo a media altura y ajustado para superar a un flojo Jorge de falta directa. Toda ayuda siempre es buena.
Correr, correr y correr
Pero no contento con el 1-0, la UDL insistía en correr, en llegar al área, en chutar a portería para acabar jugadas... El Linares se ahogaba, pero respiró cuando Juanfran chutó junto al palo. Fermín, con poco trabajo pero muy decidido -salida de puño contundente en una falta en el minuto 88-, se tiró para desviar a córner. Los linarenses habían encontrado una vía de escape al asedio: la tensión. Una entrada de Edu Payá y otra de Kike enervaron los ánimos en las recta final de un primer tiempo que se cerró con un obús de Reguilón sin recompensa debido al palo.
Con el susto en el cuerpo, el Linares si quería seguir vivo en la Copa debía mostrar su potencial. El preparador azulón lo intentó de todas las maneras. En el primer tiempo cambió a sus hombres de sitio, dando más libertad en el enganche a Rodri, metiendo por dentro a Fran y llevando a un costado a Kike. Y en el segundo acto realizó las tres sustituciones en 15 minutos. Corpas y Ferrón dieron un puntito de agresividad, el primero, y calidad, el segundo. Pero la UDL, decidida, percutía, pisaba campo rival y trataba de buscar el necesario segundo gol.
Llegó en una falta lateral. Muneta asistía a un estatrosférico Birane Ba que se anticipaba a su par en el primer palo. El senegalés, divertido, se fundió en un abrazo con Carlos Pouso. El Linares, con el 2-0, claudicó, se dejó ir, se abandonó. Momento para que Muneta hubiera redondeado su tarde noche, instante para que el incansable Carlos Fernández hubiera encontrado recompensa con un tiro a la media vuelta. Pero no. Una contra, un resbalón de Reguilón, una arrancada de Corpas y un centro raso para que Ferrón batiera a Fermín en el segundo remate en 90 minutos de los linarenses animó la contienda.
Expulsión de Corpas y polémica con Logroño Deporte
Sobre todo al Linares, apagado y difuso. Sin embargo, Corpas, capaz de lo mejor y lo peor, se tiró del barco al ver dos cartulinas en 6 minutos. Un alivio para los blanquirrojos que no culminaban sus acciones como un tiro precipitado, centrado y blandido a las manos de Jorge, de Joel Valencia, más difuminado en la segunda parte. El tiempo iba en favor de la UDL, pero el equipo visitante lo intentaría colgando balones en varias faltas, aunque sin meter el miedo en el cuerpo a un superior UD Logroñés.
Ahora toca esperar. Por de pronto recuparse para el domingo, que visitan al Racing en Liga. Respecto a la Copa del Rey, el sorteo de la tercera ronda será el 18 de septiembre. Los rivales ya se conocen: Barakaldo, Cádiz, Linense, Lleida, Reus, UCAM, Villanovense, Huracán Valencia, Ebro, Racing de Ferrol y Laredo. La fecha del choque, también 14 de cotubre. Lío asegurado. España juega contra Luxembrugo en Las Gaunas el viernes 9 de octubre, ese fin de semana hay liga (UDL, como local, contra Peña Sport) y después está la Copa, el bombo puede deparar que los riojanos vuelvan a ejercer de anfitriones. Ante esta tesitura Carlos Pouso avisa: “Qué hacemos, aplazamos el partido. Nuestro campo es Las Gaunas, así que ya me diréis”. Claro que también da soluciones: “La semana pasada ocurrió lo mismo en Oviedo y no ha habido ningún problema”. Un tirón de orejas para que Logroño Deporte abogue por el club.
UD Logroñés: Fermín; Edu Payá (Íker Alegre, min. 76), Julio Rico, Santelices, Reguilón; Jacobo, Birane Ba; Álvaro González (Miguel Santos, min. 61), Muneta (Adrián León, min. 70), Joel Valencia; y Carlos Fernández.
Linares: Jorge; Rosales, Chico, Edu, Marcos; Vicente, Rodri (Gámiz, min. 55); Fran, Kike (Ferrón, min. 61), Javi Quesada (Corpas, min. 49); y Juanfran.
Goles: 1-0, min. 19: Muneta. 2-0, min. 67: Birane Ba. 2-1, min. 77: Ferrón.
Árbitro: Ibai Rezola Etxeberria (Colegio Vasco). Expulsó al visitante Corpas por doble amarilla (mins. 78 y 84). Amonestó a los locales Edu Payá (min. 36) y Reguilón (min. 92); y a los visitantes Marcos (min. 41), Kike (min. 45) y Rosales (min. 67).
Incidencias: 2.058 espectadores en Las Gaunas, según informó el club organizador, en la segunda ronda de la Copa del Rey.