Los colegios electorales han abierto sus puertas para que los británicos voten en referéndum por primera vez desde 1975. Los ciudadanos de todo el ámbito de Reino Unido votan para decidir si quieren o no el actual sistema de voto de elección para la Cámara de los Comunes, un sistema que favorece la formación de mayorías absolutas, excepto en escasas ocasiones como sucedió en mayo de 2010 cuando se dio la circunstancia que los británicos conocen como “parlamento colgado”. Cameron venció y dio la victoria a los conservadores por mayoría simple. Los laboristas de Brown perdieron, pero podían haber formado gobierno con los liberales, que han sido la llave para que los tories abrieran la puerta del 10 de Downing Street.
Precisamente, los liberales impusieron esta condición, la de celebrar un referéndum, para formar una coalición con los conservadores. Esta vieja reivindicación, nunca atendida, ha tenido que esperar a la decisiva apuesta liberal por apoyar a unos o a otros: tories o laboristas. En cada elección, por su sistema de voto directo al candidato de cada circunscripción se vence por mayoría simple. Y en este plano los liberales siempre han perdido representantes en favor del Laborismo.
Desde esta mañana se vota también en Escocia, Gales e Irlanda del Norte, que renuevan sus parlamentos cuatros años después. También se eligen concejales y primeros ediles. La votación se va a prolongar hasta las 22:00 e incluso el tiempo parece que va a acompañar a los votantes que así se decidan para acercarse a los colegios electorales.
Los sondeos arrojan un resultado favorable al “no” .
Antes del plebiscito los británicos se mostraban en sintonía con los liberales, pero la campaña por el “sí” ha hecho aguas porque el Laborismo se ha pronunciado en contra y los conservadores, obligados por su pacto de gobierno estable, han optado por un juego de ambigüedad. El Gobierno además no ha sido capaz de recabar el compromiso esperado y se espera que la participación quede por debajo del 50% de los votos, a pesar de que se ha hecho coincidir el referéndum con otras contiendas electorales.
El resultado tardará en conocerse, dado que hasta el viernes no comenzarán a recontarse las papeletas. El veredicto se espera a primera hora de la noche, aunque el fracaso del “sí” es ya más que esperado. De cambiar el actual sistema de elección, Reino Unido implantaría el llamado “voto alternativo” que garantiza que los elegidos para hacer carrera en Westminster obtengan al menos el 50% de los sufragios.
Por otro lado, se renueva el parlamento escocés en unas elecciones a las que concurren por primera vez como gobierno los nacionalistas escoceses, que según las encuestas perderían la mayoría simple de la que gozan. Gales e Irlanda del Norte también renuevan sus Cámaras.