El estadounidense Andy Roddick sumó para su país el primer punto de la final de la Copa Davis que les enfrenta a Rusia, defensora del título, después de deshacerse del número dos ruso, Dimitry Tursunov, en tres sets aparentemente sencillos (6-4, 6-4 y 6-2) para el de Nebraska, inmaculado con su servicio.
Roddick afiló la garra estadounidense, que anhela una competición que no consigue desde 1995, todavía con Sampras vistiendo la camiseta de las barras y las estrellas. Y lo hizo ante un hermético Tursunov, endeble en el juego y sobre todo de carácter ante un Roddick que supo llevar pronto el partido a su rincón.
Lo hizo desde el inicio porque en el segundo juego del ruso ya contó con un 0-40. No sería ese el momento de la primera ruptura, pero sí el juego siguiente. Roddick, activado y enganchando al animoso público de Portland, soltó el brazo con su servicio, con el que estuvo impecable y forzó los errores de Tursunov con el suyo.
Con el 'break' en el quinto juego, Roddick disfrutó plácidamente del triunfo en el primer parcial, aunque para ello necesitó de siete oportunidades. Después de nueve 'aces', el americano encarrilaba el partido por 6-4 y empequeñecía la figura de Tursunov, al que ya ganó el pasado año en las semifinales de la competición, aunque entonces Rusia, con Safin en sus filas, se llevó la eliminatoria.
Roddick incrementó la presión sobre su rival en el inicio del segundo set y ya en el primer saque de Tursunov contó con oportunidades de 'break'. Le rompería no obstante el segundo y desde entonces de nuevo camino de rosas hasta repetir otro 6-4.
El cañón del de Nebraska era imparable para Tursunov, que se rindió demasiado pronto para una competición como la Davis, y en la tercera manga todo fue mucho más rápido. Dos roturas en el primer y quinto juego sirvieron para que en una hora y cincuenta minutos Estados Unidos, de la mano de Roddick, se adelantara en la final.
A continuación el número uno ruso, Mikhail Youzhny, tratará de superar al dos americano, James Blake, para equilibrar la eliminatoria porque de lo contrario podría conocerse el nuevo dueño de la ensaladera porque la pareja de dobles americana, integrada por los hermanos Bryant, invictos desde 2005 y que poseen un balance de 12 victorias por una sola derrota en esta competición, parecen claros favoritos ante los rusos, que en principio formarán con Igor Andreev y Nikolay Davydenko.