El vicepresidente del Interior tenía que cerrar campaña electoral en Málaga y Algeciras, pero el curso de los acontecimientos obliga a cambiar la agenda que tenía prevista. Rubalcaba permanecerá en Madrid para analizar el curso de los acontecimientos, que considera “prioritario”. No en vano se prevén manifestaciones que irrumpan en la jornada de reflexión y en el día de las elecciones. De tal modo que el ministro del Interior será sustituido por la ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez en Málaga.
Con respecto al presidente del Gobierno, en declaraciones a la cadena SER, ha entonado un mea culpa por la insistencia de las protestas, pero no ha revelado cuál va a ser la determinación del Ejecutivo. Ahora bien, el presidente Zapatero ha indicado que, en todo caso, “se actuará con inteligencia”.
El presidente se siente “interpelado” por las protestas y ha indicado que su obligación es “escuchar y ser sensible a sus demandas”. Frente a él, una incómoda Esperanza Aguirre ha propuesto en Telemadrid convocara 90.000 militantes para establecer un campamento en Ferraz y expulsar al presidente del Gobierno.