Salé acusa al pueblo de intentar un golpe de Estado

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El presidente yemení, Alí Abdulá Salé, ha concedido en las últimas horas una entrevista a la cadena de televisión británica BBC, en la que acusa a los opositores que querer provocar un golpe de Estado y en la que asume su marcha pero no a cualquier costa. Salé asegura que no puede dejar el país en manos de cualquiera , en referencia a los manifestantes que han salido a las calles a pedir su dimisión.

En palabras del líder yemení, éste incide en que: “desde Estados Unidos y Europa me instan a ceder el poder . ¿A quién debería dejárselo?, ¿A aquellos que están tratando de dar un golpe de Estado? No (...) Cualquier golpe será rechazado porque estamos comprometidos con la legitimidad constitucional y no aceptamos el caos”. En este sentido, Salé ha querido aclarar que su sucesión se llevará a cabo a través de un proceso de “urnas y referéndum”.

En cuanto al origen de las revueltas, el presidente ha advertido de la presencia de grupos terroristas en el país árabe. “Al Qaeda se está moviendo dentro de los campamentos y esto es muy peligroso. ¿Por qué Occidente no está vigilando este trabajo destructivo y sus peligrosas implicaciones para el futuro?”. Por otra parte, la iniciativa de Salé de dimitir en un plazo de 30 días a cambio de gozar de total inmunidad se produce como consecuencia de todas las revueltas y manifestaciones que están teniendo lugar en distintos puntos del país.

Supuestamente, tras la dimisión de Salé , un gobierno de unidad nacional asumirá las riendas del país con el compromiso de convocar elecciones en dos meses. A cambio, tanto el presidente como los miembros de su gabinete obtendrán inmunidad legal.

Sin embargo, parte de la oposición ha rechazado este pacto por las garantías legales que ofrece al presidente y a su gabinete, pese a que la represión gubernamental de estos dos meses de revueltas ha provocado la muerte de al menos 130 personas. “La iniciativa del CCG aborda el problema como si fuera una crisis entre dos partidos, pero nosotros hemos tomado las calles en una revolución que exige cambios globales”, ha apuntado el activista Abdulmalik al Yusufi.