El consejero vasco de Sanidad, Rafael Bengoa, ha señalado hoy que se han reforzado varios servicios del hospital de Leza, en la Rioja alavesa, “por si acaso vuelven a rechazar a los pacientes” de esta región en Logroño, aunque ha matizado que “no imagina” esta situación.
En contestación a una interpelación del parlamentario de UPyD, Gorka Maneiro, en el pleno de control de la Cámara vasca, Bengoa ha señalado que “no imagina” una situación de rechazo a los pacientes alaveses por las “repercusiones nacionales” que tendría dicha decisión.
Bengoa ha hecho estas afirmaciones cuando faltan quince días para que expire el acuerdo provisional firmado por las autoridades sanitarias riojanas y vascas, por el que Logroño se comprometió a seguir atendiendo a los pacientes alaveses.
El acuerdo, cuya vigencia se prolongó por un mes el pasado 29 de febrero, daba solución a la situación creada en la región alavesa después de que en septiembre pasado Logroño decidiera dejar de atender a los pacientes alaveses.
El consejero vasco ha señalado hoy que al reforzar varias especialidades en el hospital de Leza “no está cediendo” a las pretensiones de La Rioja, sino que trata de “cubrir las espaldas de los 12.500” habitantes de esta región que podrían quedarse sin cobertura sanitaria.
Sin embargo, ha subrayado que no contempla dicha situación por el “efecto dominó” que podría tener en el resto de las comunidades.
El consejero se ha mostrado optimista para que en “dos o tres semanas” se pueda alcanzar un acuerdo definitivo de alcance “nacional” para solucionar la atención sanitaria de los pacientes que viven en zonas limítrofes.
Ha mostrado su confianza en que esta solución pueda provenir de la proposición no de ley presentada por el diputado socialista Ramón Jauregui en el Congreso de los Diputados, en la que se exige una salida nacional al problema y “si fuera necesario establecer un mecanismo de compensación” a las comunidades.
A su juicio, el hecho de que no se llegara a una solución a la atención de los pacientes limítrofes evidenciaría que el Consejo Interterritorial de Salud es un órgano “bastante innecesario”, ya que “no habría conseguido manejar una situación que le es propia, como es que cualquier ciudadano sea atendido”.
Al respecto ha rechazado las acusaciones de Maneiro sobre que el problema “fue ninguneado” por el Ministerio de Sanidad en el último Consejo Interterritorial celebrado en Madrid.
Aunque el tema no se incluyó finalmente en el orden del día, Bengoa ha afirmado que él lo introdujo y ha explicado que “no vale discutir de tarjetas electrónicas o de calendarios comunes” si se rompe la atención sanitaria en zonas limítrofes.
Las comunidades autónomas han sabido “compartir pacientes y órganos y deben seguir haciéndolo”, ha señalado.
A este respecto, el PSE ha presentado una proposición no de ley para su debate urgente en la que pide que el Parlamento Vasco inste al Gobierno central a que adopte “las iniciativas políticas y medidas administrativas necesarias” para garantizar la atención sanitaria de los ciudadanos de zonas limítrofes.
Asimismo insta al ejecutivo a impulsar un “acuerdo de solidaridad” en el Consejo Interterritorial que garantice la continuidad asistencial y la equidad del Sistema Nacional de Salud.