El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, llamó este martes a Magna y a los sindicatos de la planta de Opel de Figueruelas (Zaragoza) a retomar el diálogo ante lo “complicado de la situación”, al tiempo que solicitó al futuro dueño del fabricante automovilístico un “último esfuerzo adicional” a la hora de tratar el “ajuste a corto plazo” de la planta con los representantes de los trabajadores.
“Quiero hacer un llamamiento a las dos partes para que retomen el diálogo y evitar que se llegue a una situación de huelga general, que sería contraproducente porque la situación está en un momento bastante delicado”, declaró el ministro tras intervenir en el Pleno de control al Gobierno del Senado.
Sebastián indicó que en la tarde del martes el Ministerio se pondrá en contacto con Magna y los sindicatos para realizarles este llamamiento y ofrecerles su labor de mediación con el fin de que se retome el diálogo.
No obstante, Sebastián solicitó “un último esfuerzo” a Magna para que el “sacrificio” que se pide a corto plazo en la planta de Zaragoza sea “lo más razonable posible”. “La solución de largo plazo de la planta, parte más complicada y difícil, entiendo que quedó resulta la pasada semana. Ahora se discute la parte más delicada, la del ajuste a corto plazo y el sacrificio y ahí sí que le pediría a Magna un último esfuerzo adicional”, indicó.
El ministro mostró su “tendencia al optimismo” en relación a la consecución de un acuerdo, si bien mostró su “preocupación” con la situación de la negociación que, según apuntó, “está en un momento muy delicado”.