Seis de cada diez niños riojanos (62 por ciento) ven la tele o manipulan una pantalla táctil o el móvil mientras comen, según el V Estudio CinfaSalud: 'Percepción y hábitos de salud de las familias españolas sobre nutrición infantil', avalado por la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP).
De ellos, casi la mitad (48 por ciento) lo hace a veces y el 12 por ciento, habitualmente, mientras que el 2 por ciento siempre tiene una pantalla delante cuando está a la mesa. De acuerdo a la investigación, Andalucía es la comunidad española donde un mayor número de niños y niñas tiene este hábito (82 por ciento), mientras que en el otro extremo se halla Navarra, donde la mitad de los escolares (53,3 por ciento) ve la tele o manipula una pantalla táctil cuando come.
El estudio revela, además, que los menores con este hábito sufren de mayor sobrepeso u obesidad que los que no lo tienen. La tendencia a la obesidad aumenta a medida que se incrementa el uso de estos dispositivos.
La investigación se basa en un cuestionario online realizado a una muestra representativa de 3.000 mujeres y hombres de todas las comunidades autónomas con hijos e hijas de entre 6 y 12 años.
PERCEPCIÓN EQUIVOCADA DEL PESO DE LOS HIJOS
De acuerdo a los datos ofrecidos por los españoles encuestados respecto al peso y altura de sus hijos, en base a los cuales se ha calculado el IMC (Índice de Masa Corporal) de los menores, el estudio CinfaSalud revela que la percepción de los padres y madres españoles respecto al peso de sus hijos no se corresponde con la realidad en cuatro de cada diez casos (42,3 por ciento), y que el 13,1 por ciento no tiene conciencia del sobrepeso u obesidad reales de su niño o niña.
De hecho, aunque perciban que su hijo o hija no se encuentra en su peso ideal, cuatro de cada diez (43,1 por ciento) padres y madres españoles no toman medidas al respecto. Esta actitud se mantiene en La Rioja, donde el 43,8 por ciento de los progenitores no reacciona de ninguna manera cuando piensa que el peso de su hijo es inadecuado. Tres de cada diez (31,3 por ciento) lo llevan al pediatra, mientras que el 6,3 por ciento pide ayuda a un nutricionista. En cambio, casi dos de cada diez (18,8 por ciento) lo ponen a dieta por iniciativa propia sin consultar a un profesional, decisión que, según el experto de la SEPEAP, “puede también entrañar riesgos para la salud del menor”.
UN DESAYUNO COMPLETO, ASIGNATURA PENDIENTE
De acuerdo al estudio, los menores de nuestro país no siempre siguen hábitos nutricionales saludables en el hogar. En primer lugar, ocho de cada diez niños y niñas españoles (82,8 por ciento) no desayunan correctamente. Como explica González Zorzano, “esta primera comida proporciona al menor la energía necesaria para afrontar la primera parte de la mañana y contribuye al rendimiento escolar, por lo que debe cubrir al menos entre el 20-25 por ciento de las necesidades nutritivas de los niños”.
Por esta razón, “es muy importante que los progenitores conozcan qué alimentos no pueden faltar en un desayuno completo y equilibrado”. Idealmente, este debe contener un lácteo, un cereal y una fruta. En este sentido, la investigación revela que La Rioja, junto con Castilla y León, es la comunidad donde menos escolares toman fruta para desayunar (6 por ciento, frente al 20 por ciento de Canarias) y que solo uno de cada cuatro (24 por ciento) bebe zumo natural.
Además, los niños y niñas de esta región, de nuevo junto a los castellanoleoneses, son quienes menos yogur (4 por ciento) toman a esta hora del día, pero también quienes más consumen repostería no casera (20 por ciento). Por otra parte, siempre suelen desayunar.
En el almuerzo, el 8 por ciento de los escolares riojanos toma bollería industrial, a pesar de las advertencias de los expertos, que aconsejan comer a media mañana una pieza de fruta de temporada, un yogur o un bocadillo de queso u otro equivalente lácteo. El bocadillo sigue siendo el alimento preferido tanto en los almuerzos (el 66 por ciento lo toma) como en las meriendas (72 por ciento). Los escolares riojanos son, además, los que más frutos secos toman para almorzar (22 por ciento, frente al 2 por ciento de los murcianos).
A LA COLA EN CONSUMO IDEAL DE CARNE
Respecto a los tipos de alimentos que ingieren los escolares de esta región, La Rioja se encuentra a la cola en el consumo ideal de carne: el 72 por ciento la consume en exceso -más de tres veces semanales-, frente al 28 por ciento de las Islas Canarias. Solo el 28 por ciento toma pescado con la frecuencia recomendada -en más de tres ocasiones a la semana-, mientras que únicamente uno de cada diez escolares (16 por ciento) come verdura más de siete veces semanales y el 40 por ciento toma fruta con la misma frecuencia.
Como advierte González Zorzano, “los hábitos de los escolares españoles se alejan cada vez más de nuestra dieta mediterránea y de muchos de los alimentos que la componen, como el pescado, las frutas y las verduras, el yogur y los frutos secos. En esta dieta, están incluidos todos los grupos de alimentos en las dosis que recomienda la pirámide alimentaria, por lo que aporta la cantidad de energía y nutrientes necesarios para un correcto desarrollo físico e intelectual”.
En cambio, “es cada vez más frecuente por parte de la población infantil el consumo de carne, dulces y comida rápida”.
Lo mismo sucede en La Rioja, como confirma el dato de que el 86 por ciento de los niños y niñas come chucherías alguna vez a la semana, segundo porcentaje más alto de todas las comunidades -solo por detrás del País Vasco-. También el consumo de comida rápida por parte de la población infantil sigue siendo preocupante entre los escolares riojanos, dado que tres de cada cuatro (74 por ciento) la toman al menos una vez al mes, a pesar de su escasa calidad nutricional. Además, el 6 por ciento de ellos -de nuevo, el porcentaje más elevado de toda España- la come más de cinco veces al mes.
Por otra parte, el 94 por ciento de los niños y niñas riojanos no duerme las diez horas diarias recomendadas por los expertos, a pesar de que diversos estudios indican que la falta de horas de sueño puede estar relacionada con el aumento del sobrepeso y la obesidad, además de afectar al rendimiento físico e intelectual.
Además, son poco más de la mitad (56 por ciento) de los escolares de La Rioja los que destinan más de dos horas al ejercicio físico, hábito que contribuye a equilibrar el consumo y el gasto energético. En cambio, tres de cada diez (30 por ciento) dedican como mucho dos horas a la semana a actividades físicas extraescolares, mientras que el 14 por ciento no les destina ni siquiera una hora.
Solo cuatro de cada diez (40 por ciento) progenitores comen habitualmente con sus hijos en La Rioja. Como recalca el doctor Coronel, “la educación y la supervisión de los padres y madres, que deben predicar con el ejemplo, juega un papel fundamental a la hora de lograr que un niño siga una dieta variada y equilibrada”. Sin embargo, solo cuatro de cada diez (40 por ciento) riojanos comen habitualmente con sus hijos (diez o más comidas semanales), mientras que tres de cada diez (30 por ciento) realizan con ellos menos de una comida o cena al día. Además, el 16 por ciento toma habitualmente algo distinto que sus hijos e hijas a la hora de la comida o la cena.
Como fuente para informarse sobre hábitos de alimentación saludable en edad infantil, seis de cada diez (58 por ciento) padres y madres encuestados en La Rioja aseguran acudir al pediatra, aunque son los españoles que menos lo hacen.