Tengo entre 40 y 50 años y no he pasado el sarampión, ¿debo vacunarme?

La alarma y también la confusión ha cundido estos días en torno a la vacuna del sarampión para adultos. No se trata de ninguna nueva estrategia, pero en los últimos días el Ministerio de Sanidad ha recordado que todos los nacidos entre 1970 y 1980 y que no se hayan vacunado o no hayan padecido el sarampión deben recibir la vacuna.

¿Qué tienes que hacer si estás en ese rango de edad? Como ha detallado a Rioja2 Eva Martínez, jefa del Servicio de Epidemiología y Prevención Sanitaria del Gobierno de La Rioja, lo más seguro es que no estés vacunado, ya que la triple vírica con dos dosis (para sarampión, rubeola y paroditis) comenzó a administrarse en 1981. De este modo, si no te has vacunado por otros motivos o no has pasado el sarampión, lo mejor es que acudas a tu centro de salud para ser inmunizado.

Los nacidos antes de 1970 serían ya inmunes, por edad, mientras que los de 1981 en adelante ya estarían vacunados, por lo que la recomendación va destinada a los que tienen entre 40 y 50 años actualmente y no están seguros de haber pasado la enfermedad o haberse vacunado.

Aumentan los casos de sarampión en Europa

Esta recomendación no es nueva, sino que forma parte del calendario acelerado de vacunación, publicado en julio de este año. El motivo de que se haya recordado estos días es que el pasado jueves la Comisión Regional Europea de Verificación para la Eliminación del Sarampión y la Rubéola (RVC, por sus siglas en inglés) certificó que hay cuatro países europeos que ya no están libres de sarampión. Y es que Reino Unido, Grecia, Albania y República Checa han perdido el estatus de haber erradicado la enfermedad.

Eva Martínez ha detallado que, aunque es algo que no está ocurriendo en España, sí que se está registrando un aumento en los casos de sarampión en algunos países europeos, debido a que ha bajado la cobertura de vacunación, es decir, hay padres que optan por no vacunar a sus hijos.

El sarampión es una enfermedad infecciosa más frecuente en niños. Si la padecen adultos, puede derivar en complicaciones como neumonía, encefalitis u otitis. Algo que se puede prevenir de forma muy efectiva con la vacuna.