Naciones Unidas se prepara para “el peor escenario posible” en Haití ante la inminente llegada de la temporada de huracanes, que podría empeorar la crisis humanitaria causada en el país caribeño como consecuencia del terremoto del pasado mes de enero, señaló este martes la directora en Haití de la Oficina de Coordinación para Asuntos Humanitarios (OCHA) de la ONU, Sarah Muscroft.
“Es un país sumamente expuesto a los huracanes. Con tantas personas en situación de vulnerabilidad tras el reciente terremoto, una grave temporada de huracanes -como pronostican los expertos- podría ser devastadora. Por ello, nos estamos preparando para el peor escenario posible”, indicó Muscroft en declaraciones recogidas por la oficina de prensa de Naciones Unidas.
Las agencias de la ONU han diseñado un plan de contingencia que establece la creación de equipos que estarán permanentemente preparados para dar una respuesta humanitaria urgente en caso de que se produzcan intensas lluvias o huracanes, especialmente en los campamentos de Puerto Príncipe en los que se refugian los desplazados por el seísmo.
El resto del país, que vive una situación de extrema pobreza y escasez de infraestructuras, continúa en una situación de suma vulnerabilidad, especialmente en las áreas que aún se recuperan del paso de los huracanes Fay, Gustav, Hanna e Ike, que causaron más de 800 muertos en el plazo de un mes durante 2008, señaló la OCHA.
Otras agencias humanitarias también planean las respuestas ante un posible deterioro de las condiciones de la población por la llegada de huracanes. El Programa Mundial de Alimentos ha preparado raciones urgentes de alimentos para 2 millones de personas en 31 localidades diferentes del país.
La Federación Internacional de la Cruz Roja cuenta con una fuerza humanitaria permanente en estado de vigilancia y está relocalizando sus materiales de asistencia en diez pueblos y ciudades diferentes.