La Federación de Empleadas y Empleados de los Servicios Públicos de UGT (FeSP-UGT) de La Rioja ha denunciado el abandono que están sufriendo los trabajadores y trabajadoras del centro de hemodiálisis de Logroño, gestionado por Fresenius Medical Care Services La Rioja S.L.
De este modo, FeSP-UGT La Rioja critica que “no se están adoptado las medidas organizativas necesarias para garantizar la salud de su personal trabajador y de los pacientes, relativas a la distancia de seguridad interpersonal, al uso de mascarillas FFP2 en sitios cerrados de uso público, y a los aforos”.
Por otro lado, “desde el inicio de la pandemia no se están realizando pruebas PCR o serológicas periódicas a los trabajadores, ni cuando regresan de permisos y/o vacaciones”, seguran desde el sindicato, que añade que “hasta el inicio de este año, tampoco se realizaban ni a empleados ni a pacientes, a pesar de que existieron contagios, y de que se trata de población de riesgo potencialmente expuesta”.
“La empresa con su desatención está asumiendo un riesgo innecesario que podría generar un brote dentro de una plantilla de trabajadores especialmente cualificados para realizar la atención que ofrecen, y que supondría un problema añadido a la prestación del servicio. Además, se trata de una plantilla ajustada ya hasta el extremo, por el recorte de personal que ha sufrido en el último año”, han explicado desde UGT.
Además, “la gota que colma el vaso es la reciente supresión de la prestación de servicio en el turno de tarde de los martes, jueves y sábados, provocando una masificación de pacientes y trabajadores en los turnos actuales”, denuncian que han pasado de atender a los pacientes en 12 turnos de trabajo (6 días de mañana y 6 de tarde), a hacerlo en 9 turnos (6 días de mañana y 3 de tarde).
“De este modo, los turnos de los lunes son los que mayor carga asistencial y de personal soportan, con un número de entre 15 y 19 pacientes, cuando antes se atendía aproximadamente a 10 por turno”, afirman.
Según apuntan desde FeSP-UGT, estas condiciones impiden mantener la distancia de seguridad interpersonal y dificulta el cumplimiento de los aforos que debería tener el centro. “Todo ello resulta inaceptable como medida organizativa de la gestión de los espacios del centro, accesos, zonas de espera y en la gestión de las citas de los pacientes, tendente a garantizar el cumplimiento de las recomendaciones sanitarias con el objeto de evitar los contagios y propagación del covid-19”, han valorado.
FeSP-UGT de La Rioja considera que “la situación es lo suficientemente grave para que las personas responsables del centro tomen las medidas oportunas para solucionarla, tal y como puso este sindicato de manifiesto en febrero ante la Consejería de Salud del Gobierno de La Rioja, sin que hasta la fecha haya obtenido respuesta ni se haya producido variación alguna”.