La empresa Barena Hispania, especializada en la recuperación de barricas de roble usadas, está a punto de abrir sus instalaciones en Viana, localidad navarra cercana a Logroño integrada en la Denominación de Origen Calificada Rioja.
Barena, instalada ya en Burdeos (Francia), regenera las barricas de roble utilizadas para la crianza del vino mediante la inyección a presión de partículas de cristal que eliminan la capa interna del tonel, aquella en la que la madera de roble ha perdido su capacidad aromática.
El método de Barena, de patente suiza, se basa en respetar la barrica, sin desmontarla, extrayéndole sin procesos químicos la capa interna de la madera que ha agotado su capacidad de aporte de sabor al vino.
Con maquinaria de alta precisión se elimina una capa de unos dos milímetros de grosor de madera de forma que se deja al descubierto una nueva capa capaz de ofrecer el mismo aroma que una barrica nueva, pues el método de inyección de vidrio no altera la calidad del roble.
La planta instalada en Viana, en la que trabajarán 35 personas, podrá tratar hasta 20.000 barricas. Una vez regenerada la madera, la barrica se trata con el quemado habitual que dará los aromas que distinguen al vino.
Las barricas de roble utilizadas por las bodegas riojanas para envejecer el vino cuestan entre 300 y 400 euros dependiendo del tipo de roble -americano, francés o español- y sobre todo del fabricante, según un portavoz de Barema.