No es habitual que las puertas de entrada del convento de las Madres Carmelitas descalzas de Cabretón, en Cervera del Río Alhama, se abran para recibir a una nueva hermana. De hecho, hace 15 años que ninguna ingresaba en este monasterio de clausura riojano. Hasta que Mercedes Khartabil se ordenó el pasado 5 de febrero y, con ella, ya son 14 las carmelitas de Cabretón, según ha recogido la web Religión en Libertad.
Esta joven de 27 años trabajaba de médico residente en el área de nefrología del Hospital General Universitario de Alicante cuando tomó la decisión más importante de su vida: dejarlo todo y hacerse monja de clausura. Pese al esfuerzo que le había supuesto su carrera de medicina, asegura que su radical cambio no ha sido una pérdida sino todo lo contrario, una ganancia.
Antes de ella, la última en llegar lo hizo en 2007 con 24 años. La ahora compañera de Mercedes Khartabil tiene hoy 39 años y es la segunda más joven del grupo. Lo cierto es que no es habitual que alguien tan joven como ella decida ordenarse y en los monasterios la media de edad es bastante más elevada actualmente.
Pero Mercedes lo tuvo claro. Fueron su madre y su abuela las que le educaron en la fe católica, pero la vocación religiosa la encontró en las Jornadas Mundiales de la Juventud 2016 en Cracovia, Polonia. A partir de ahí, comenzó a realizar peregrinaciones a Santiago, Fátima o en los monasterios de las Carmelitas, que a Mercedes “le removían por dentro”.
Hasta que en una Javierada, peregrinación que se realiza al castillo en el que nació San Francisco Javier, su grupo paró de nuevo en uno de los monasterios de la orden, el de Cabretón y acabó de decidirse. Después de acabar Medicina y la residencia, decibió volver, ya para cambiar su vida por completo.