Además de tres muertos, al menos quince personas han resultado heridas en los violentos enfrentamientos entre los partidarios y los opositores del presidente yemení, Alí Abdulá Salé. Los manifestantes se volvían a lanzar a las calles para pedir la dimisión de Salé, que renuncia a dejar el poder. Según un reportero de Reuters que presenció lo ocurrido, la contienda comenzó cuando los manifestantes intentaron ir desde el campamento que han instalado en la capital a una calle que lleva al campamento montado por el general Alí Mohsen, un importante líder militar que ha expresado su apoyo al movimiento que pide la dimisión de Salé y un régimen democrático.
Los manifestantes se toparon con hombres armados y simpatizantes de Salé, quienes dispararon mientras los detractores del presidente lanzaban piedras. El periodista de Reuters ha dicho que no está claro quién comenzó la reyerta.
El Ministerio de Defensa ha indicado en un SMS que todo comenzó cuando varios miembros de tribus que respaldan a Salé fueron hasta el cuartel general de Mohsen para ofrecerse como mediadores.
Los manifestantes contrarios al presidente y las fuerzas de Mohsen atacaron a los miembros de tribus, desencadenando un tiroteo, según el Ministerio. Las tropas del general tienen su base cerca de la calle donde los manifestantes están acampados desde hace varias semanas.
En la clínica improvisada que se encuentra dentro del campamento de los manifestantes, los médicos han recibido el cadáver de un hombre que tiene una herida de bala en la cabeza y a otros ocho heridos, la mayoría de los cuales fueron golpeados por piedras. Se desconoce si el balance de víctimas del Ministerio incluye a las recibidas en esta clínica.
Mientras, en la ciudad de Taiz, al sur de Saná, cientos de manifestantes han resultado heridos este martes en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, según la cadena de televisión qatarí Al Yazira.