No ha sido la primera ocasión, sino que se había intentado desde hacía meses, desde que arrancó el Movimiento 15-M. Apostados a las puertas del Congreso, a la izquierda de los leones, un muro infranqueable de agentes de la Policía Nacional cortaba el paso a los 'indignados, pero ¿Por qué no disfrazarse camuflado de lo que no son? Cambiemos su indumentaria. Coloquemos una corbata, un traje, una camisa y vistamos la 'indignación' con las mejores galas y entraremos al Congreso por la amplia puerta situada junto a la garita de los policías, la misma por la que accede el coche oficial del presidente del Gobierno.
Eran los representantes del Movimiento 15-M de Barcelona, apoyados por los de Madrid, los mismos que protestaban el día en que Mas optó por acudir a la sesión del parlament catalán en helicóptero junto a otros consejeros y diputados para evadir una protesta, que se tornó en violencia.
Vestidos al uso “pijo” del área del barrio de Las Cortes, los agentes de policía no tuvieron reparos en abrir las vallas que cortaban el acceso al Congreso tanto por arriba como por abajo, prácticamente desde la Plaza de Neptuno. Por su parte, los 'indignados' se excusaron diciendo que iban al hotel Palace, situado frente a la Cámara Baja. Y no hay otra manera de acceder al complejo si no es rompiendo el cordón policial. Tan sencillo como subirse a un taxi y colocarse un traje y un vestido y hacerse pasar por el cliente del lujoso Palace de Madrid.
Toda vez que superaron el escollo, protestas en mano, consiguieron que uno de los cinco 'indignados' entregara su documento de protestas mientras los diputados tomaban asiento en el Salón de Planos. La afortunada y falsa 'no indignada' ha conseguido también colar la pregunta acerca de las apariencias, que engañan, para acceder a un edificio oficial. A juicio de los 'indignados' con los que este medio pudo hablar más tarde, la Policía Nacional juzga “tu ideología” según “te vistas, te peines o actúes”.
A unos cuantos metros, la alegría estalló entre los 'indignados' por el éxito conseguido por sus compañeros. De este modo, su documento de medidas propuestas por los asamblearios llegó a manos del portavoz de IU, Gaspar Llamazares, quien lo leyó a toda la Cámara Baja en la sesión plenaria dedicada a analizar la actuación del Gobierno en Bruselas el pasado jueves.
No obstante, el conato de violencia desatada entre Neptuno y el Paseo del Prado a las siete de la mañana y previo a esta mofa a las autoridades desencadenó la protesta espontánea que cortó la Gran Vía a última hora de la tarde y que acabó con la lectura de un manifiesto nuevamente en Sol.