Viticultores riojanos pedirán con una protesta a pie el arranque voluntario del viñedo

Las organizaciones agrarias apelan a la “unidad” del sector vitivinícola y llaman a participar en las movilizaciones previstas para el próximo miércoles, 30 de octubre, en Logroño para exigir el cumplimiento de la Ley de la Cadena y que el Ministerio haga caso a la petición de arranque voluntario ante la situación de “debilidad” que vive el sector. El arranque -indican- “permitirá volver a la estabilidad”.

Así se han expresado este lunes los principales representantes del sector de las OPAS, Eduardo Pérez (ARAG-ASAJA), Óscar Salazar (UAGR-COAG), Nestor Alcolea (UPA Rioja), Jorge González (UAGN) y Jesús Bauza (UAGA) en una comparecencia de prensa para explicar los actos previstos que comenzarán a las 10,00 horas con una concentración en la plaza del Mercado.

Posteriormente realizarán una marcha hasta la Delegación de Gobierno de La Rioja (sobre las 11,00 horas) donde se leerá un manifiesto con las principales reivindicaciones.

Una decisión que toman ante “el abuso y la posición de dominio que están ejerciendo los 'grandes' contra los más débiles de la cadena de valor; los viticultores. Los agricultores y las cooperativas, después de años vendiendo uva por debajo de costes, están literalmente arruinados”, ha criticado Óscar Salazar.

“Llevamos años pidiendo una regulación de la cadena de valor para que cada eslabón tenga su espacio, pero no es posible”.

Además, desde las organizaciones agrarias reclaman al Consejo Regulador que “haga su trabajo de control”.

Como ha indicado Eduardo Pérez “ya no es suficiente con medidas coyunturales (cosecha en verde, destilaciones...) hay que ir un paso más allá con medidas estructurales y la más rápida y eficaz es la del arranque”, por eso, insiste, “queremos que el ministro se siente de una vez por todas y escuche al sector en las reclamaciones”.

Por su parte, Nestor Alcolea defiende el arranque “porque el problema es real. Hay una sobredimensión de la masa vegetal de la denominación”.

También ha denunciado “las prácticas que algunas bodegas, con sus acciones en esta vendimia han llevado a cabo riéndose de sus propios proveedores porque tienen más uva a disposición de la que necesitan y se pueden permitir el lujo de hacer estos comportamientos, como, por ejemplo, retrasar la apertura en bodegas y rechazar las uvas”.