La Comunidad de Madrid reconoce la muerte de 1.065 ancianos en residencias en marzo pero no aclara cuántos tenían coronavirus

Las residencias de ancianos de la Comunidad de Madrid han registrado en lo que va de mes de marzo un total de 1.065 fallecimientos. Así lo especifica un informe de la Consejería de Políticas Sociales, al que ha tenido acceso eldiario.es, que aclara que estas muertes no pueden atribuirse exclusivamente al coronavirus debido a la falta de test para su detección.

En el mes completo de marzo de 2019, murieron 460 internos en las residencias concertadas y de gestión indirecta de la región. A falta de los datos completos de toda la red –475 residencias entre públicas y privadas– de los que no dispone la Consejería de Políticas Sociales, el Gobierno regional calcula que fallecieron entre 800 y 900 ancianos en las residencias de toda región en el mismo periodo del año. El incremento por tanto sería de un 20% de muertos este año.

La Comunidad de Madrid superaba este jueves la barrera de los 2.000 pacientes fallecidos con coronavirus, lo que representa el 51% total del país y supone 265 muertes más que los datos del miércoles.

Del más de millar de fallecidos registrados desde el 1 hasta el 25 de marzo en las residencias madrileñas, 760 personas murieron en los centros mientras que 305 lo hicieron en hospital, especifica el informe, que asegura que han dado positivo por coronavirus 655 personas de las residencias madrileñas, si bien no se ha realizado el test diagnóstico a todos los que presentaban síntomas o han fallecido.

Actualmente, 388 ancianos de residencias madrileñas se encuentran hospitalizados y 14.894 en aislamiento, aseguran desde la Consejería. De los residentes que han sido aislados, 4.156 presentan algún síntoma y 10.738 son actualmente asintomáticos.

Los datos no son oficiales sino que son fruto del trabajo realizado por los inspectores pertenecientes al Centro de Control de Calidad e Inspección (CIRA) de la Consejería de Políticas Sociales de la Comunidad de Madrid. El estudio se ha hecho en base a las 475 residencias público-privadas que hay en la región en los que residen un total de 52.031 ancianos.

La emergencia sanitaria que ha provocado la epidemia del coronavirus está golpeando a las residencias de mayores de toda España, y especialmente a las de Madrid, un foco de población vulnerable que no cuenta, según denuncian trabajadores, patronal y familiares, con las medidas suficientes para prevenir contagios y tratarlos adecuadamente cuando se producen.

La estimación que la Consejería de Políticas Sociales es que en las residencias madrileñas se necesita a día de hoy 185.000 mascarillas y un total de 930.000 EPIs, además de personal sanitario que se cifra en torno al centenar para atender adecuadamente a los ancianos.

Intervención de las residencias

La Comunidad tiene desde este jueves autoridad para intervenir de manera inmediata residencias en situación crítica, asegura este mismo informe. El Gobierno regional ha elaborado una orden de actuación en los centros residenciales de la región, adaptando así la orden ministerial que autoriza a la Consejería de Políticas Sociales a intervenir de manera inmediata aquellas residencias que se encuentren en situación crítica.

En la práctica, esto significa que desde la Consejería se podrá designar a un funcionario para dirigir y hacerse cargo de aquellos centros donde la situación haga inviable la prestación de este recurso.

La Consejería de Sanidad firmó el miércoles un protocolo para fijar el criterio a la hora de trasladar o no a los residentes con infección respiratoria al hospital ante el desborde de los recursos. En ese cribado se quedaban fueran los mayores con nivel de dependencia severo, según avanzó El Español. Pero unas horas después, y tras hacerse público el documento, el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso dio marcha atrás y rectificará los criterios.