Javier Ortega Smith, concejal de Vox en el Ayuntamiento de Madrid, no dimitirá después de haber arrojado una botella al edil de Más Madrid, Eduardo Fernández Rubiño, al final del pleno celebrado este viernes. Una dimisión que han reclamado todos los partidos de la oposición y también el propio alcalde, José Luis Martínez-Almeida.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha exigido al portavoz de Vox en el Ayuntamiento, Javier Ortega Smith, que entregue su acta de concejal en el Palacio de Cibeles por su comportamiento en el Pleno con el portavoz adjunto de Más Madrid, Eduardo Fernández Rubiño. “Es un día muy triste y es una agresión inaceptable”, ha expresado el regidor ante los medios de comunicación a la finalización del Pleno. Considera así Almeida que Ortega Smith “no está en estos momentos capacitado para representar al conjunto de los madrileños”. También la portavoz de Más Madrid en el Ayuntamiento, Rita Maestre, ha reclamado la “dimisión inmediata” del concejal de Vox Javier Ortega Smith por la “agresión física” a Rubiño, pero también la del presidente del Pleno, el 'popular' Borja Fanjul, por comportarse “como cómplice del agresor”.
Para Maestre, lo que está detrás de la agresión física es “el intento de la extrema derecha por hacer callar”. “Le exijo la entrega inmediata del acta porque de la misma manera que hace pocos meses en este Pleno otro concejal (el socialista Daniel Viondi) tuvo que abandonar su escaño porque no estaba cumpliendo con sus responsabilidades y a las dos horas ya no era concejal y hoy Ortega Smith tiene que dejar de ser de forma inmediata concejal y portavoz de Vox porque es incompatible con su condición de representante democrático”, ha exigido.
También ha reclamado la dimisión del presidente del Pleno, Borja Fanjul, “que se ha mantenido cómplice con el agresor”. “Cuando esa agresión se ha producido Fanjul le ha dado la palabra al agresor, no tomar ninguna de las sanciones que están recogidas en el reglamento del Pleno para garantizar que las sesiones se puedan desarrollar en democracia y en libertad”, sin expulsarle.
El secretario general del PSOE-M, Juan Lobato, también ha exigido este viernes que Ortega Smith dimita “de inmediato” por su comportamiento. “No vale con que solo algunos demos ejemplo”, ha defendido Lobato. El pasado mes de septiembre dimitió un concejal del PSOE tras ser expulsado del Pleno por darle tres palmadas en la cara a Almeida.
El portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Madrid, Javier Ortega Smith, no renunciará al acta de concejal, como le han exigido PP, Más Madrid y PSOE, y ha negado agresión alguna al concejal Eduardo Fernández Rubiño al tirarle sobre el escaño “una botella vacía de agua”. “Que se recupere de sus graves lesiones el agredido”, ha ironizado en su despedida de su comparecencia de prensa.
El debate sobre la moción de urgencia dedicada a Pamplona, elevada al Pleno de Cibeles por Vox, y después de que Ortega Smith haya sembrado dudas sobre las amenazas de ETA a la familia de la concejala socialista Adriana Moscoso, se ha saldado con la decisión de la izquierda de abandonar la sesión por sus palabras, cuando se ha producido el incidente con la botella al pasar junto al escaño de Rubiño.
“Yo desconozco su historia familiar y la voy a dar por cierta porque no tengo argumentos para decir que es verdad o que es mentira. Yo la voy a creer a usted y la creo. Lo que yo no sé es cómo ha aceptado usted subir aquí a defender esto”, ha lanzado Ortega Smith a Moscoso cuando ha relatado que durante su juventud su familia tenía que mirar todas las mañanas los bajos del coche por si se encontraban una bomba lapa.
El concejal de Vox se ha justificado diciendo, fuera de la sesión plenaria, que resulta “una mofa y un desprecio a las víctimas del terrorismo decir que el pacto con la banda terrorista ETA entra dentro de las reglas del juego de la democracia”.
“Y resulta que cuando quien les habla pasa al lado de uno de los portavoces de Más Madrid recibe un insulto por su parte. Esto evidentemente podríamos decir que entra dentro de la lógica del debate político pero cuando se hace en el contexto de un insulto a las víctimas del terrorismo es absolutamente inaceptable”, ha declarado a la prensa.
“No debería haber tirado la botella”
“Probablemente como ser humano que soy no debería haberle tirado la botella, que por cierto estaba vacía. No ha habido agresión ninguna y lamento que algunos, como el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, quieran remar políticamente y sacar algún tipo de rédito diciendo que es inaceptable esta 'agresión'”, ha continuado Ortega Smith.
A Almeida, abogado del Estado, le ha preguntado que dónde está la agresión porque “se ha caído una botella y no le ha dado ni siquiera. Ha caído encima del escaño. ¿Dónde está la agresión física? Porque lo que ocurre es que la izquierda no sabe cómo pedir perdón de las infamias que comete en cada una de las intervenciones”, ha declarado.
Javier Ortega Smith ha querido comunicar a “esta izquierda absolutamente desnortada y echada al monte, que pacta con los terroristas, que insulta a las víctimas, que desprecia a quienes señalan y permite que señalen a jueces, a periodistas”, y también a un PP “que barre para casa” que, “sintiéndolo muchísimo” no renunciará.
“Ni voy a dejar mi acta de concejal, ni voy a dejar de denunciar a esa izquierda echada al monte y a esa derecha acobardada que no sabe cómo ponerse de rodillas. Así que a todos les deseo Feliz Navidad y que se recupere de sus graves lesiones el agredido”, ha terminado para marcharse del Pleno de Cibeles.