El recién nombrado alcalde de Madrid, el popular José Luis Martínez-Almeida, ha reconocido este sábado en su primer discurso como regidor madrileño que gracias al “superávit” en las cuentas del Consistorio dejadas por el Gobierno de Manuela Carmena podrá realizar su “revolución fiscal” y “bajar impuestos” en su nueva etapa al frente de la ciudad, cargo al que ha accedido gracias a los votos de los concejales de Ciudadanos y Vox.
Almeida se ha presentado como “continuador” de los exalcaldes populares José María Álvarez del Manzano, Alberto Ruiz Gallardón y Ana Botella“ y ha dedicado sus primeras palabras a agradecer a la expresidenta madrileña Esperanza Aguirre y al líder del PP, Pablo Casado, su presencia en el pleno de este sábado.
Respecto a su polémico acuerdo de gobierno en el que ha incluido a la extrema derecha, Martínez-Almeida ha retado a “que se encuentre en estos programas cualquier cuestión que esté fuera del ordenamiento jurídico”.
“Entre todos”, ha añadido “es como construiremos Madrid, no queremos dejar a nadie detrás”. “Queremos ganar el futuro y no reescribir el pasado”, ha proseguido, criticando de forma velada la apuesta por la memoria histórica realizada por el anterior Ejecutivo municipal.
A su juicio “es esencial recuperar la dignidad y prestigio institucional que requiere Madrid”. “Tenemos un programa sensato, de sentido común, dirigido a solucionar los problemas de los madrileños”, ha concluido, para advertir a renglón seguido que “la gestión no es para educar o adoctrinar, es para que los madrileños elijan su futuro”.