A Ángel Garrido este domingo le ha tocado el papel más difícil. El presidente de la Comunidad de Madrid ha reaparecido públicamente por primera vez después de ser descartado por Pablo Casado como candidato en la presentación oficial de los elegidos para el tique electoral madrileña.
Garrido ha llegado al acto visiblemente serio y respaldado por varios de sus compañeros de Gobierno. Ante los periodistas, se ha reafirmado en su posición “moderada” y ha enviado un mensaje a los que le señalaban por un talante que ya no encaja con la nueva línea dura del PP. “Yo soy como soy, no se va a cambiar a nadie a estas alturas. A mí me gusta una forma de gestionar moderada, tranquila, con respeto a los demás. No me voy a afilar el colmillo a estas alturas”.
El jefe del Ejecutivo ha asegurado que solo piensa “en el día a día” y que aún no ha meditado si quiere un puesto en las listas de Madrid. Admite que aún no ha analizado qué hará a partir de ahora, más allá de la misión de seguir gobernando la Comunidad. “Pablo Casado es una persona muy generosa, cuando tenga algo decidido lo comentaré y si cree que puedo ser útil en algún sitio, encantado de estar con él”.
Este domingo también, 48 después de que Casado le convocara en Génova para comunicarle su descarte, Garrido ha recibido las primeras muestras de agradecimiento del partido, que no hizo ninguna referencia a su figura en la nota de prensa que comunicaba los candidatos elegidos.
“Quiero dar un agradecimiento muy especial para ángel garrido. Ángel y su equipo se hicieron cargo en unas circunstancias muy difíciles y lo están haciendo muy bien. Tú y tu equipo contáis con todo el apoyo del PP de Madrid hasta el final”, ha dicho el presidente del PP de Madrid, Pío García-Escudero. Tras sus palabras, el auditorio ha arrancado en un aplauso cerrado a Garrido que ha culminado con un abrazo con el líder del PP, Pablo Casado.