A la altura del número 126 de la calle Concejal Francisco José Jiménez Martínez, los transeúntes se detenían con curiosidad este martes ante unas flores y unas velas colocadas al lado de un poste. El domingo pasado, Pilar, de 79 años, cruzaba por ese mismo punto, la intersección entre un carril bici y uno de los caminos pedestres del parque de la Cuña Verde, en el distrito de Latina, cuando fue arrollada por un patinete eléctrico. Murió un día más tarde a causa de las heridas, mientras el conductor del vehículo sigue en busca y captura.
El suceso ocurrió a las 13.55 del domingo. Pilar volvía hacia su casa acompañada de un familiar cuando un individuo, con gorra y mascarilla de color negro, la atropelló a bordo de un patinete eléctrico y se dio a la fuga, según confirmaron fuentes policiales a elDiario.es. Sanitarios del Samur-Protección Civil acudieron a la zona minutos más tarde, registraron que la anciana sufría un traumatismo craneoencefálico y la trasladaron intubada hasta un hospital cercano. Allí falleció horas más tarde.
Desde entonces, la Policía Municipal busca al conductor del patinete. A través de sus perfiles en redes sociales han pedido a quien pudiera haber presenciado la escena que se ponga en contacto con la Unidad Judicial de Tráfico, aunque, según las mismas fuentes, de momento no ha habido avances en la investigación.
Unos días más tarde, en la zona, algunos vecinos pasean o hacen ejercicios en el parque. Algunos han oído hablar de lo acontecido el domingo, pero parece imposible localizar a algún testigo, mucho menos a alguien que pudiera reconocer al patinador, enfundado con gorro y mascarilla, circulando a toda velocidad.
Cruzando la carretera, hay un comercio chino, que estaba abierto el día del atropello, aunque su dependiente dice que no vio nada. Tampoco una de las dueñas de un bar que se encuentra unos metros más abajo. “Es que estamos metidos aquí dentro, se te pasan muchas cosas. Los vecinos sí que llevan un par de días hablando del accidente. Dicen que se dio a la fuga, parece”, explica, al tiempo que precisa que agentes policiales se pasaron el lunes por la zona y estuvieron preguntando en busca de posibles testigos.
La policía cree que si el vehículo era de alquiler podría ser más fácil ubicarlo, gracias a los servicios de geolocalización de las empresas que arriendan estos patinetes, aunque el transporte podría ser privado, y por tanto, mucho más difícil de rastrear.