El Ayuntamiento de Madrid ha decidido retirar la subvención de 61.200 euros que recibía la escuela de tauromaquia Marcial Lalanda. Una decisión basada en “argumentos relativos a los derechos animales” y considerar el presupuesto de la escuela “desproporcionado”. Esta partida cubría la realización de clases, talleres y seguros. A la vez, el gobierno municipal sí que mantiene la asignación para el mantenimiento de este espacio, que asciende a 800.000 euros, según han indicado fuentes consistoriales.
La concejala de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid, Celia Mayer, ha comunicado la retirada de la subvención a los representantes de la escuela de tauromaquia Marcial Lalanda en una reunión que se ha desarrollado en horas previas al encuentro que mantendrá esta tarde con organizaciones animalistas.
En un comunicado, el Ayuntamiento ha explicado que respetará los compromisos adquiridos por el Ayuntamiento de Madrid hasta junio de 2016, así como el mantenimiento del espacio municipal de la Venta del Batán, donde la escuela venía desarrollando su actividad; y las partidas destinadas a obras de adecuación y mejora y al déficit de explotación.
Según el Ayuntamiento, el presupuesto de la escuela, que tiene una media de 38 alumnos, es “desproporcionado” en relación al que se destina a actividades culturales o deportivas “de mayor demanda”. Además, el comunicado apunta que las clases y talleres que se imparten en ese centro “no son compatibles con la defensa de los derechos de los animales”.
Según indicado el equipo de Gobierno, el pasado mes de febrero la Junta de Gobierno municipal -encabezada entonces por la alcaldesa Ana Botella (PP)- decidió mantener la actividad de la escuela bajo la dirección y gestión de la empresa pública Madrid Destino, por lo que el centro pasó a ser competencia municipal.
El Ayuntamiento expone que va a estudiar posibles los usos del espacio municipal y valorar una cesión total o parcial del mismo. Por último, recuerda que no tiene competencias en la gestión de la plaza de toros de Las Ventas y los eventos que allí se celebran, de los que es “responsable exclusiva” la Comunidad de Madrid.