La presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata del PP, Isabel Díaz Ayuso, se ha manifestado este miércoles “en contra” de los carteles xenófobos de Vox contra los menores extranjeros no acompañados, un debate que para Ayuso es “maniqueo” porque la formación de extrema derecha compara datos que no son comparables, ha asegurando en una entrevista en la Cadena Ser. Pese a esto, Ayuso ha asegurado que Vox no es ultraderecha, “solo en según qué cuestiones”, y ha vuelto a abrir la puerta a pactar un gobierno con la formación de Santiago Abascal aunque asegura que su objetivo es gobernar en solitario.
“Es un debate que es maniqueo porque expone la pensión no contributiva de una mujer mayor con el coste de mantenimiento de un menor que no es cierto que sean 4.000 euros, es menos, que podríamos compararlo con el coste de otras personas que la administración sí mantenemos al 100% desde el punto de vista sanitario, los mayores de las residencias...”, ha asegurado Ayuso. “Ni siquiera lo que expone ese cartel es cierto”, ha defendido la presidenta madrileña.
Ayuso ha recordado que en Madrid hay 269 menores extranjeros no acompañados para una comunidad de casi 7 millones de habitantes. Además, la candidata del PP ha asegurado que las comunidades autónomas no tienen las competencias y que la administración “está obligada a integrarlos”. De esta forma, Ayuso ha venido a decir que pese al debate que genera Vox.
“Las comunidades no tenemos competencias en esto, es una cuestión de inmigración, de fronteras, que ahí poco podemos hacer. La legislación que los ampara son dos leyes orgánicas en las que tampoco tenemos competencias así que poco podemos hacer. Y luego es que estamos obligados a integrarlos y una persona que no lo está da igual que haya nacido en Boadilla del Monte que puede ser un problema para sí mismo y para los demás porque no tiene herramientas para salir adelante”.
Ayuso ha asegurado a renglón seguido que comparte con Vox que “no todos los hombres son agresivos por el hecho de ser hombres”, y “hay que entender” que no todos los extranjeros “son delincuentes por el hecho de serlo”. “Para mí pesa un delito igual lo cometa alguien nacido aquí que alguien nacido en Casablanca [Marruecos]”.
Preguntada por si pactará con el partido de extrema derecha el próximo 4 de mayo si depende de ellos para gobernar, Ayuso ha incidido en que no comparte los debates de la formación de Santiago Abascal respecto al veto parental o a los menores extranjeros no acompañados pero ha asegurado que en otras cuestiones no siempre está en “desacuerdo” con ellos. “Es ultraderecha dependiendo para qué cuestiones” y ha puesto como ejemplo que conoce a diputados y miembros del PP que ahora están en este partido que no le parece que lo sean.
Ayuso ha asegurado que si se empieza con “las etiquetas de los ultras”, a su parecer, ahora mismo en los parlamentos y en la política española hay personas que “están por delante”.
“Tenemos a un señor como el señor Otegi al que nadie le está llamando 'ultranada' y tenemos según qué postulados como Pablo Iglesias, que por cierto ha perdido el pulso de la calle de los barrios más humildes, que dice auténticas barbaridades como acabar directamente con la concertada o cerrar el Hospital Zendal”, ha zanjado la presidenta.
La candidata del PP aseguró hace una semana que su intención es contar en su gabinete con “gestores” de Ciudadanos –pese a que rompió el Gobierno de coalición para convocar los comicios– y de la formación de Santiago Abascal porque “hay muy buenos políticos” en ambos partidos. La presidenta del PP lo hará, dijo, independientemente de la representación de cada uno de estos partidos tras los comicios, y de los pactos que puedan producirse. Una forma, defendió, de integrar todas las sensibilidades de la derecha en el nuevo Ejecutivo de la Comunidad de Madrid.