La presidenta de la Comunidad de Madrid y líder del PP madrileño, Isabel Díaz Ayuso, ha rebajado este lunes las expectativas sobre la propuesta de su jefe de partido, Alberto Núñez Feijóo, de que gobierne la lista más votada tras las elecciones municipales de mayo. Ayuso ha defendido que “no ve mal” que si tras los comicios acaba habiendo más escaños en uno de los bloques, gobierne la lista mayoritaria de ese bloque y ha recordado que ella misma fue presidenta sin ser la lista más votada tras las elecciones autonómicas de 2019 en las que el PSOE, con Ángel Gabilondo como candidato, ganó las elecciones.
La presidenta regional también ha deslizado que la propuesta de su jefe de filas no tiene sentido porque el PSOE nunca la va a aceptar. “Va a tener difícil solución”, ha dicho. Y ha insistido: “Es hablar sobre futuribles que no lo sé”. La dirigente madrileña ha defendido que hay que “buscar la manera” de estudiar opciones como “la segunda vuelta”. En todo caso, ha criticado que “una minoría” como “Bildu” haya estado “opinando sobre la reforma laboral de todos los españoles”.
“Yo creo que si hay más escaños hacia un lado que hacia el otro que quieren un gobierno u otro... bueno... no lo veo mal. Lo que sí creo que es un sinsentido es lo que está pasando, de manera que minorías son quienes deciden por todos, y, sin embargo, los partidos que han obtenido más votos, que han quedado segundos o terceros o primeros y no han podido hacer gobierno se quedan fuera”, ha lamentado.
Las declaraciones de Ayuso se producen el mismo día en que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, se ha ido a Cádiz a presentar su “Plan de Calidad Institucional”, una propuesta de reformas legales que, entre otras cuestiones, abordará el enésimo intento del PP de que se cambien las normas para que gobierne la lista más votada, aunque no logre la mayoría de sufragios ni de apoyos del resto de partidos.
Una propuesta que, en todo caso, Feijóo limitará a las elecciones municipales, tal y como reveló el dirigente gallego la semana pasada. El PP plantea así a escasos cuatro meses de los comicios locales y autonómicos una reforma legal limitada, 'ad hoc' para sus intereses particulares y con la mirada puesta en que el 28 de mayo sirva de palanca para las generales, previstas a finales de año.
Porque Feijóo no incluye los gobiernos autonómicos en su propuesta. Es decir, el PP aspira a arrebatar Ejecutivos regionales al PSOE aunque no gane las elecciones y pese a que suponga pactar con Vox. “A mí me interesa es de la lista más votada”, dijo el propio dirigente la semana pasada. Y donde no le interesa, no lo propondrá.