Carmena rebaja la deuda de Madrid de 5.600 millones a la mitad en menos de cuatro años
El Gobierno de Manuela Carmena intenta pasar página a la crisis de Podemos en la que seis de sus concejales han sido suspendidos cautelarmente de militancia de la formación al borrarse del proceso de primarias y presenta este lunes, junto con el PSOE, sus presupuestos para 2019. La alcaldesa de Madrid quiere mandar así el mensaje de que la crisis con Podemos no afecta a su Gobierno ni a la gestión y la estabilidad del Consistorio.
Según las previsiones del Ejecutivo municipal, el Ayuntamiento de Madrid cerrará este año con 700 millones de superávit y devolverá otros 700 millones de deuda. Las cifras son provisionales a la espera de que a principios de 2019 se cierre la ejecución presupuestaria, por tanto estos datos pueden variar en torno a un 20%, recuerdan a eldiario.es desde el Área de Economía y Hacienda del Consistorio que dirige el concejal Jorge García Castaño, uno de los seis ediles expedientados por Podemos. Los datos se harán públicos durante la presentación de las cuentas. El superávit del Ayuntamiento de Madrid al cierre de 2019 superará los 650 millones de euros, según los cálculos del Gobierno de Carmena.
El Ayuntamiento de Madrid registró un superávit en 2017 de 1.120 millones de euros y redujo su deuda en 450 millones hasta los 3.423 millones. Por tercer año consecutivo cerraba las cuentas municipales con superávit y reducía deuda, entonces el concejal del área era Carlos Sánchez Mato. Este superávit lo está destinando este año a inversiones al margen de su presupuesto ordinario, que quedó muy reducido por el plan económico financiero impuesto por el Gobierno de Mariano Rajoy después de que el Ministerio de Hacienda dirigido por Cristóbal Montoro interviniera las cuentas municipales. Sánchez Mato fue destituido al negarse a apoyar ese plan económico.
Comparado con el cierre de 2014, antes de que Ahora Madrid llegara al Gobierno, se espera acabar 2018 con una reducción del 54,4% de la deuda viva del Ayuntamiento: de 5.936 a 2.703 millones de euros. En junio de 2015, cuando Carmena llega al Ayuntamiento, la deuda era de 5.600 millones. El Gobierno de Carmena, por tanto, cumplirá con su compromiso de dejar por debajo de la mitad la deuda del Consistorio respecto a como se la encontró.
El Ayuntamiento de Madrid ha reducido la deuda muy por encima de lo que dejó presupuestado el anterior equipo de Gobierno que dirigía Ana Botella (PP), cuando su previsión era cerrar 2018 con 3.723 millones de deuda. Según los datos del Consistorio aún provisionales, serán 1.000 millones menos.
Acuerdo con el PSOE frente a la crisis de Podemos
Ahora Madrid, que gobierna en minoría, presenta este lunes sus cuentas para 2019 junto al PSOE. Por primera vez, el Ejecutivo municipal hará público su proyecto de presupuestos, el último de su primer mandato, teniendo el apoyo de los socialistas de antemano, una semana después de que Podemos técnicamente se haya quedado sin representación en el Ayuntamiento después de que haya suspendido cautelarmente de militancia a sus seis ediles en el Consistorio, algunos de ellos muy próximos a la regidora.
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y la portavoz del grupo municipal Socialista, Purificación Causapié, acompañadas por el delegado del área de Economía y Hacienda, Jorge García Castaño, y de la edil del PSOE Érika Rodríguez, presentarán el proyecto del Presupuesto General del Ayuntamiento de Madrid para 2019, después de que antes sea aprobado en una Junta de Gobierno extraordinaria. La intención del Ejecutivo municipal es que sean revalidados en el Pleno municipal de diciembre, tras pasar un periodo de enmiendas.
Al mismo tiempo que cerraba el acuerdo de la mano de los socialistas de las que serán sus últimas cuentas, la alcaldesa quiso hace unos días volver a marcar distancias con Iglesias y Podemos, en un empeño de la regidora desde que tomó posesión en junio de 2015 de que no se la vincule al partido morado.
“Con Iglesias no he hablado. No tengo una vinculación específica con él ni necesidad de tener con él una conversación. Creo que es un problema que surge en el marco de Podemos y no tengo nada que ver. Yo no soy del partido Podemos ni tengo ninguna vinculación política directa con el partido”, decía la regidora el pasado jueves.
No obstante, el plan de Carmena para ir una candidatura conjunta con Podemos sigue en pie. Sabe que si no, no hay posibilidades de revalidar el mandato. La intención de todos ahora es retomar las negociaciones y el partido de Iglesias no vetará a los ediles para que vayan en la lista de Carmena, aunque eso suponga su expulsión de la formación.