Ciudadanos conserva el poder en Arroyomolinos. El pleno de la localidad ha investido este martes a Andrés Martínez Blanes como nuevo alcalde en sustitución de Carlos Ruipérez, dimitido por su imputación por corrupción en la llamada Operación Enredadera.
12 de 21 ediles han avalado el continuismo en el municipio salpicado por la trama investigada por la Fiscalía Anticorrupción: los cuatro de Ciudadanos, los tres del Partido Independiente de Arroyomolinos (PIArr), dos de los los tres de Arroyomolinos Sí Puede (una de las concejalas no ha asistido al pleno) y los tres ediles no adscritos (dos exconcejales del PSOE y otro expulsado de Ciudadanos). Este último es Juan José González y también está investigado por la misma operación que se ha llevado por delante al alcalde, una trama que alcanza a 44 municipios de toda España y que adjudicó decenas de contratos para el control del tráfico de manera ilegal.
El PP, con siete concejales, ha definido la investidura como un “fraude democrático porque ha resultado alcalde con los votos de tránsfugas del PSOE y un tránsfuga de su partido”. “La regeneración y transparencia que vendía Ciudadanos y que nos exige a todos hoy ha quedado demostrado que no les importa para conseguir un Gobierno con concejales salpicados por supuestos delitos de corrupción”, ha dicho la portavoz del partido en Arroyomolinos Ana Belén Millán. El portavoz adjunto del PP en la Asamblea de Madrid, Alfonso Serrano, también ha acusado a Ciudadanos de tener “nefasto respeto en la Comunidad de Madrid con la lista más votada y con al regeneración”.
Por su parte, la portavoz del PSOE –y única concejal del partido después de que dos miembros abandonasen el grupo–, Maria Pilar Sánchez Torres, ha defendido su negativa a apoyar a Ciudadanos porque no tienen “garantías de que en su Gobierno estén otra vez investigados y tránsfugas”.
Del mismo modo, ha acusado a los dos concejales que antes pertenecían a su grupo y este martes han votado a favor del nuevo alcalde de Ciudadanos de hacerlo por “situaciones personales”. “Uno porque es un concejal que tiene en el Ayuntamiento un puesto de trabajo parcial y no es lo mismo cobrar 2.400 euros [que cobraría si tuviese este cargo a tiempo completo] que los 1.000 euros actuales”.
Ante la ola de críticas, el nuevo regidor ha justificado que “un Gobierno multicolor enriquece”, y que dárselo “a un solo partido es retrogrado”. Andrés Martínez ha respaldado tras asumir la alcaldía al exregidor imputado, que a su juicio “no da el perfil de lo que aparentemente parece”. “Es un hombre honesto, el tiempo lo va a decir”, ha expresado.
Por su parte, el presidente del Partido Independiente de Arroyomolinos, Francisco Ferrero, ha defendido su apoyo al alcalde de Ciudadanos porque aporta “continuidad”. “A nueve meses de acabar una legislatura sería un cambio enorme para vecinos y trabajadores, luego las urnas decidirán quien es nuevo alcalde y nuevo Gobierno”, ha afirmado. El concejal no adscrito Juan Carlos García, que comenzó la legislatura en el PSOE, ha afirmado que “ahora no era el momento de irse del Gobierno”.