Los negocios familiares de Isabel Díaz Ayuso han vuelto un año después al centro del debate político madrileño. La afirmación de la diputada socialista Carmen López sobre el hermano de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Tomás Díaz Ayuso, durante el Pleno monográfico de este jueves que trataba la contratación pública en la pandemia, provocó una bronca con la presidenta de la Asamblea regional, María Eugenia Carballedo (PP), que terminó con la salida en bloque de toda la oposición del hemiciclo –incluido Vox– ante lo que consideraron un “abuso de poder” y un intento de “censura” por parte de Carballedo. “Dedíquense ustedes al hermano de la señora Ayuso, que se dedica a ir por los hospitales a sugerir a las unidades de contratación a qué empresa hay que contratar”, fue la afirmación de López que enfureció a Carballedo.
La de este jueves no era la primera vez que se nombraba al hermano de Ayuso en la tribuna del Parlamento regional. Es una constante desde que elDiario.es destapó hace ya un año la vinculación de Tomás Díaz Ayuso con una empresa a la que el Gobierno regional adjudicó varios contratos, todos ellos a dedo.
Hace ahora un año, esta redacción desvelaba que la Comunidad de Madrid adjudicó por la vía directa, sin concurso ni concurrencia de otras firmas, 70.500 euros a una empresa para la que trabaja el hermano de la presidenta madrileña, Tomás Díaz Ayuso. Diez contratos que se adjudicaron desde septiembre de 2019 -con la llegada de Ayuso a la presidencia- hasta marzo de 2020. No eran los primeros.
Entonces, elDiario.es también detalló que el primer contrato a esa misma compañía se produjo años antes coincidiendo con el primer cargo público de la presidenta, en 2017, cuando fue nombrada viceconsejera de Justicia en el Gobierno de Cristina Cifuentes. Ahí no quedaba la cosa. El Gobierno regional también compró mascarillas durante la pandemia por valor de 150.000 euros a otra empresa vinculada con la sociedad para la que trabaja el hermano de Ayuso, como desveló de nuevo este diario. Tres informaciones que la oposición recuerda en cada Pleno a la presidenta de la Comunidad de Madrid y que le molestan especialmente.
Desde entonces, cada vez que se le menciona en la Cámara autonómica, Ayuso estalla contra la oposición. Este jueves lo hizo también la presidenta de la Asamblea, cuya reacción, expulsando a una diputada socialista nada más deslizar el nombre del hermano de la presidenta, ha encendido todas las alarmas de los partidos.
Es por ello que Más Madrid ha pedido este viernes la comparecencia de Tomás Díaz Ayuso en el Parlamento y el PSOE tratará de impulsar una comisión de investigación sobre la contratación que fiscalice estos y otros contratos durante la pandemia. “Vista la parcialidad de ayer de la presidenta de la Asamblea, pedimos la comparecencia de Tomás Díaz Ayuso para que pueda explicar su relación con las contrataciones de la Consejería de Sanidad”, explicaba la portavoz de Más Madrid, Mónica García, sobre esta petición de comparecencia. “Queremos investigar todos los contratos, los que puedan estar vinculados al hermano de Ayuso pero también a cualquier ciudadano o empresa sobre la que pueda haber sospechas”, asegura en conversación con elDiario.es Carmen López, la diputada socialista que fiscaliza la contratación pública del Gobierno regional.
La realidad es que ambas cuestiones corren el riesgo de quedar en nada: tanto la comisión de investigación como la comparecencia de Tomás Díaz Ayuso. El PP cuenta con la mayoría –cuatro puestos de siete– de la Mesa de la Asamblea, que preside precisamente María Eugenia Carballedo. Y ambas peticiones deben pasar por el primer filtro de este órgano, que es el que decide cuáles de los temas que se registran por los partidos regionales prosperan y cuáles no.
Isabel Díaz Ayuso ha defendido la actuación de la presidenta de la Asamblea regional al expulsar del pleno del jueves a una diputada socialista por mencionar a su hermano.
Sobre esas alusiones a Tomás Díaz Ayuso durante el debate y la petición de su comparecencia en la Comisión de Sanidad por parte de Más Madrid, la presidenta ha declarado que ese es el “precio” a pagar por “estar arriba en unas encuestas y por estar gobernando la Comunidad de Madrid”. Desde su equipo llevan semanas alimentando también la idea de que desde Génova pueden acabar construyéndole una polémica para acabar con su candidatura a la presidencia del PP de Madrid que la ha enfrentado a la dirección del partido con Pablo Casado a la cabeza.
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