La discoteca Teatro Barceló de Madrid, donde este jueves por la noche bailaron y bebieron decenas de jóvenes, ha emitido un comunicado para “lamentar” el contenido de las imágenes difundidas en redes sociales. En ellas, se observa cómo un grupo numeroso de personas incumple las medidas de seguridad por la COVID-19. En la nota que ha hecho pública, sus responsables califican esas actitudes de “puntuales” y argumentan que tuvieron lugar en el momento en que se estaba produciendo “el cierre del local” y que se comprometen a endurecer los controles.
En la noche de ayer jueves, las redes sociales se hicieron eco de imágenes de jóvenes dentro del local incumpliendo todas las medidas de seguridad: sin mascarilla, sin distancias y con aglomeraciones, un escenario que podría parecer previo a la pandemia, pero que se dio en el día con más contagios –44.357– y con la incidencia más alta –795– desde marzo.
Las imágenes que ayer corrieron por las redes sociales contravienen las normas que la discoteca publica en su web: en ellas, se pide a quienes asistan “evitar las aglomeraciones”, “respetar las marcas del suelo”, “mantener la distancia de seguridad con los grupos ajenos” o “usar la mascarilla de manera obligatoria”. En este último caso, insisten en que se tenga puesta tanto en los accesos, como al levantarse y recuerdan que las autoridades sanitarias recomiendan que se use en todo momento, salvo que se esté comiendo o bebiendo. La otra norma que se incumple a simple vista es la de evitar los “desplazamientos innecesarios”.
Teatro Barceló mantiene su programación de conciertos y a través de sus canales en redes sociales había publicitado para este jueves la actuación de Yago Roche, que les haría “disfrutar a lo grande”. En la imagen que acompañaba al mensaje, la foto del artista y el horario del evento, entre las 18.00 y las 23.45 horas. Al ser el toque de queda de la Comunidad de Madrid a las 23.00 horas, el artista publicó en sus redes que finalmente no se había celebrado el concierto.
En el comunicado, la discoteca expresa que está “recabando toda la información para poder interpretar correctamente las imágenes” que, aseguran, corresponden a una “reacción espontánea” de una parte de los asistentes, que se encontraban “en una parte muy concreta” de la sala. Además, subrayan que, tras “estos nueve segundos” que sostienen que duró el hecho, el personal de control de acceso los expulsó por “incumplimiento de la normativa sanitaria”.
También se comprometen tras lo sucedido a “reforzar” sus medidas para garantizar que no vuelve a suceder algo así y mandan un mensaje de disculpa al resto de trabajadores del sector.
Por su parte, la Policía Municipal ha anunciado que abrirá una investigación para esclarecer lo ocurrido. En un comunicado, ha indicado que están esperando a recibir la denuncia por parte de la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid y que, una vez la tengan, tomarán las medidas administrativas y/o penales precisas. Además, ha argumentado que no acudió al lugar anoche porque no recibieron ninguna llamada informándoles de hubiese ninguna fiesta en el interior del local.