Tras su tercer mes en funcionamiento, los foros locales impulsados por el Ayuntamiento de Madrid ya están comenzando a influir en la política municipal. Los vecinos que se han unido a estos espacios de participación, distribuidos en cada uno de los 21 distritos de la ciudad, han conseguido que alrededor de 40 propuestas promovidas en estos espacios hayan sido aprobadas en los últimos plenos de las juntas de distrito.
Por ejemplo, recientemente en Carabanchel los grupos políticos apoyaron una de estas iniciativas, el refuerzo del equipo de profesionales de servicios sociales en el distrito de Carabanchel. En Chamberí también se acordó proteger al vecindario frente a los ruidos, y en Puente de Vallecas se ha instado a la Comunidad de Madrid a que adopte medidas para garantizar el suministro de agua, luz y gas en los hogares en riesgo de exclusión social.
“Esta iniciativa es lo más municipalista que se ha hecho en años en Madrid”, apunta Luis Miguel Muñoz, vecino, participante de este espacio en Vicálvaro y vocal vecino de Ahora Madrid, sobre esta iniciativa a la que ya se han inscrito 3.619 personas y 451 entidades . En cada distrito los foros se han distribuido en mesas con diferentes temáticas: igualdad, educación, urbanismo, presupuestos participativos...
Una vez que estos pequeños grupos se han constituido y los participantes, vecinos o miembros de colectivos, se han reunido, ya pueden presentar propuestas al pleno de la Junta municipal de distrito. “Hasta ahora solo lo podían hacer los partidos políticos o las asociaciones que estaban registradas”, incide Miriam Hermida, participante también del foro, vocal vecina de Ahora Madrid y que coincide con Muñoz en la mesa de Economía Social.
Esta vecina de Vicálvaro recuerda “las dificultades” que tuvieron los colectivos sociales del distrito durante los años de Gobierno municipal del Partido Popular, no solo para ser escuchados en los plenos, también para que sus iniciativas llegasen a ser debatidas por los partidos políticos. “No siempre daban el turno de palabra. Podías conseguir intervenir, pero no tenías posibilidad de réplica y ni siquiera tenían que contestarte”, añade Hermida.
“Participación directa” de los vecinos
Por eso destacan la novedad de esta iniciativa que “abre una vía de participación directa” para los residentes. Aunque no todas las propuestas de las mesas llegan a ser votadas en el pleno de la junta, ya que hay un filtro previo, la Comisión Permanente. Este órgano es el encargado de hacer una criba para que finalmente se debatan en cada pleno, como máximo, tres proposiciones impulsadas en estos espacios.
“En algún foro hay 16 mesas, la Comisión debe regular el ritmo de las propuestas. Es el órgano que tiene una visión de conjunto de lo que sucede en todas las mesas y grupos de trabajo”, justifica Edurne Irigoen, directora de gabinete del área municipal de Coordinación Territorial y Cooperación Público-Social. Hermida y Muñoz lamentan que una vez que las propuestas han sido examinadas en este punto no sean vinculantesy tengan que pasar por el pleno.
“El foro local se plantea como una instancia en el que los concejales rinden cuentas de la actividad del Ayuntamiento”, continúa Irigoen. Según añade, las mesas pueden pedirle explicaciones al representante municipal aunque la propuesta aprobada no sea de competencia municipal, como ha sucedido en Puente de Vallecas con la petición al Gobierno regional para que no siga tolerando casos de pobreza energética. “No es de nuestra competencia pero sí de nuestra incumbencia”, advierte.
Actualmente estos foros cuentan con más de 300 mesas constituidas. En una de ellas, en la de Infancia y Adolescencia del distrito de Chamartín, sus siete participantes tiene muy claro cuál es la aportación que les gustaría conseguir para la infancia del barrio, una casa de la juventud. “Ahora mismo hay poco espacio para que los jóvenes se puedan reunir”, explica Marta Palacios, coordinadora de la mesa y que considera que estos foros “son los sitios para soñar” con mejoras para el vecindario.
¿Cómo tiene pensado actuar el Ayuntamiento con las propuestas aprobadas que supongan un gran desembolso económico? Se incluirán en el presupuesto ordinario del año próximo, “respetando los tiempos” e “incorporándolo en el conjunto de necesidades del distrito”, responde Irigoen. Además, la portavoz municipal añade que el desarrollo de las iniciativas que salen de estos espacios requieren tiempo para poderse ejecutar.
Restablecer el buhometro
Antes de apostar por un proyecto, las mesas diagnostican cuáles son las necesidades que perciben en el distrito. En el caso de la mesa de Infancia y Adolescencia de Charmatín, los integrantes apostaron por el restablecimiento del servicio del buhometro (autobús nocturno con el mismo recorrido que las líneas del suburbano) o la subvención de entradas para que niños, niñas y adolescentes puedan asistir a conciertos en el Auditorio Nacional, situado en el distrito.
En esta mesa, su coordinadora lamenta que los menores de 16 años no puedan participar en los foros. “Es una vulneración directa de los derechos de la infancia”, comenta. Este colectivo está representado a través de las portavoces de las Comisiones de Participación de la Infancia y Adolescencia (COPIA), que recogen las ideas aportadas por los jóvenes del distrito. Sin embargo, los participantes de este espacio lamentan que en algunos casos “el teléfono escacharrado” no permita que la aportación primitiva llegue a la mesa.
Desde el área municipal de Coordinación Territorial y Asociaciones reseñan que les gustaría que los foros fuesen un “órgano muy flexible y vivo”, por eso contemplan que en esas mesas se aporten también diagnósticos y opiniones a la Comisión Permanente o “directamente al concejal”.
Jornadas para divulgar la economía social
“Tenemos un proyecto para hacer unas jornadas muy básicas y dar a conocer en el barrio qué es la economía social e invitar a la gente a participar. Queremos que se den cuenta que la pueden desarrollar en su día a día, con bancos del tiempo o mercadillos de trueque”, apunta Miriam Hermida, inscrita en el foro de Vicálvaro.
Además, consideran que esta es una prueba de fuego para evaluar la implicación vecinal. “El Gobierno municipal ha puesto esto a disposición de la sociedad. Ahora depende de la gente, habrá que se ver si se animan a participar”, finaliza Pedro Lucas, coordinador de la mesa.